Diario de un altermundista

Ilegalización de ideas

Otro partido pretende ser ilegalizado. Esta vez se trata de Iniciativa Internacionalista (II), resultado de la unión de dos partidos de ámbito estatal y de algunas personas involucradas con la izquierda abertzale. En mi opinión, la vigente ley de partidos en virtud de la cual se ha prohibido la candidatura de II a las elecciones europeas tiene varios objetivos. Los que a mí más me llaman la atención son los siguientes. Uno es el de evitar que ETA, o lo que se ha llamado su entorno, se financie gracias a conseguir actas de representación política. Dos, criminalizar la disidencia ideológica al pensamiento hegemónico en la política española, que no es ni de izquierdas ni independentista. Y tres, perseguir y atemorizar a activistas con actitudes inconformistas con el statu quo, lo que también toca a los movimientos sociales, por definición rebeldes e inconformistas. Intentar reducir la financiación de ETA es correcto, y si esto se demuestra no creo que haya ninguna objeción en evitarlo con medidas legales, que ya existían. Porque el terrorismo, así como cualquier tipo de violencia, es bajo mi punto de vista totalmente inaceptable y es de recibo intentar acabar con él. Pero también lo es la persecución ideológica que está ocurriendo en Euskadi. Es decir, en caso de usar la violencia la ley que lo prohíbe se debe aplicar con firmeza. Pero cuando el medio para conseguir unos objetivos políticos es presentarse a una elecciones, no veo otra razón que la persecución ideológica para justificar la ilegalización de un partido. Además, como estrategia para acabar con la violencia no creo que sea útil, porque si no se permite que las ideas, en este caso independentistas, sean canalizadas a través de la participación democrática cada vez serán más quienes opten por otras vías, como las violentas. Ilegalizando las ideas no acabaremos ni con la violencia, ni con el terrorismo que, por supuesto, no deben ser legales.

Más Noticias