Dado que la indignación de los ciudadanos crece y se modula a golpe de telediario, corremos el riesgo de que nos ocurra con los últimos escándalos de corrupción política lo que nos ha ocurrido con los escándalos de corrupción financiera: que nos olvidemos de ellos cuando dejen de salir en los telediarios, que será cualquier día de estos.

Al hilo de los escándalos los partidos están haciendo algunas propuestas: unas de verdad, otras de mentira y otras imposible de saber si son de verdad o de mentira. Aun contando con la buena fe y la mejor voluntad de todos, lo cual es mucho contar, ninguna medida política o legislativa puede implantarse y dar frutos de hoy a mañana. Sin embargo, analistas y ciudadanos coinciden en que hay que hacer algo y además hacerlo con urgencia para frenar en seco el descrédito de los políticos y de las instituciones.

¿Pueden los partidos hacer de manera rápida y visible algo que convenza a los ciudadanos de que esta vez van en serio? Tal vez no puedan hacer mucho, pero sí algo. Es obvio que el caso Bárcenas está relacionado con la financiación y la contabilidad del Partido Popular. No sabemos en qué grado, pero sabemos que lo está. Pues bien, hay una cosa fácil y visible que cualquier partido puede hacer de hoy a mañana simplemente con proponérselo: habilitar en sus páginas web una pestaña denominada Contabilidad y Finanzas en la que los  ciudadanos, con un simple clic, podamos conocer todos los ingresos y gastos de ese partido.

No debe ser muy complicado diseñar una aplicación que gestione esa información y la haga comprensible y accesible a todo el mundo, una aplicación que conteste a preguntas tan sencillas como estas: cuánta gente trabaja en el partido, cuánto cobra cada uno, qué patrimonio tiene el partido, cuánto cobran todos y cada uno de sus cargos públicos, con qué empresas contrata el partido sus servicios y cuánto asciende cada contrato, cuánto se gastaron en las últimas elecciones, qué gastan en publicidad, cuánto ingresa la organización, por qué conceptos lo ingresa, qué donaciones tiene, qué prestamos tiene pedidos y con quién, cómo los va a pagar... La web debería estar actualizada y disponer de un canal de participación donde los usuarios hicieran las preguntas que estimasen convenientes y el partido adquiriera el compromiso de contestarlas.

Es obvio que el PP o CiU no querrán hacer algo así, pero ¿podrán o querrán hacerlo el PSOE o Izquierda Unida? Es obvio que si lo hicieran pondrían en aprietos al PP, pues si tu igual se comporta con ejemplaridad a ti te es más difícil justificar tu negativa a hacer lo mismo. Pero es obvio también que una medida así es costosa para cualquier partido en todos los sentidos, y lo es sencillamente porque significa compartir información sensible con los ciudadanos. Y compartir información sensible es compartir poder. Y compartir poder es perder poder.