Puntadas sin hilo

La herencia envenenada

 

 

¡Anda que ha tardado Rajoy en decirlo! Encima de que el presidente del Gobierno, con sus inicuas reformas, le deja la casa política perfectamente decorada y amueblada para la gran aventura España express de la regeneración y definitivo encumbramiento, va el tío y se queja en la despedida en las Cortes de que le dejan una herencia envenenada. ¿Pero qué quiere usted, que le lleven en tacataca? Aparte de que esa previsible alegación es una primera muestra de de su indignidad política. Luego vendrán que la cosa está mucho peor de lo imaginado y que por eso hay que torturar aún más a los débiles.

Y todo ello con el regocijo y choteo de sus diputados y de sus millones de seguidores ciudadanos. Lo que ocurre es que ahora llegan ustedes al poder y, como no tienen ni noción de nada que no sea a lo bestia, ven que la cosa les va a quedar grande y comienzan a escarbar, como los toros remisos y sin casta. Ande, don Marianito, gobierne por derecho, aunque no sea usted ni Morante de la Puebla, ni Ponce, ni, por supuesto, José Tomás. Que no se descubra que es usted un novillero de pueblo, un torero de charlotada. ¡Qué indecencia aducir los deméritos del anterior! Pues no toree usted, no tome la alternativa, no debute, nadie le obliga, España no le necesita, en contra de lo que usted mismo cree. Su única muleta es la ambición soterrada por llegar al poder, y ya ha llegado. Ahora hay que lidiar. Sin miedo a los pitos, sin envanecerse por los sordos y a la vez sonoros aplausos de la masa conservadora que es España. ¡Santo Dios!, ¿pero por qué habrá tanto facha, tanto ultraconservador, tanto simplemente duro conservador, esos últimos a los que usted pertenece? ¿Pero qué quieren conservar si todo está y le han dejado en ruina, como dicen usted y sus huestes y su cuadrilla de Cospedales, Camps y Pons? Ustedes no son capaces de torear ni al toro de Osborne, si acaso al de la bandera de toro negro, Y no vengan con que ya lo arreglaron en el 96, aquello fue una capeíta, un festival benéfico, con un novillito desmochado comparado con el morlaco de ahora. ¡Conservar!, cuando lo que hay que hacer es crear, innovar, poner a España en la vanguardia de lo emergente. Usted y ustedes son lo peor de la tradición de España. Su primera medida debería ser nombrar Ministro de Disculpas.

¿Va usted a llevar de banderillero al padre de Mariluz Cortés? ¿Y a Esperanza Aguirre de moza de estoques para la educación? ¿Cospedal, directora de lidia, Camps el que lleva el botijo? Su cuadrilla promete. Pero tenga cuidado al recibir a España a puerta gayola, le puede empitonar. España es una incógnita.

 

Por cierto, si le apetece le invito el domingo a cazar faisanes. Definitivamente no tienen ustedes vergüenza.

Más Noticias