Que no, que no, que eso no arreglaría nada.

¿Y si fuese Rubalcaba quien se quemase?

Bueno, eso ya estaría un poco mejor. Pero ¿y a quién ponían?

A nadie. ¿Por qué hay que poner a alguien? Como el PP. O a un representante de cada fuerza política en equipo y en coalición. Eso se acuerda en dos tardes.

¿Y así cree que se produciría un súbito y fuerte despertar, y sin disputas, y sin decir que algunos no son izquierda real?

Pues sí, creo que se produciría ese volver a las urnas, que es mejor que  las barricadas, y pelillos a la mar con eso de que alguien no es izquierda.

No le niego que sería un maravilloso espectáculo. Pero aunar tantas y tan distintas voluntades y puntos de vista, no sé, no sé. ¿Y con qué programa se presentarían?

Con el programa de los oprimidos, de los maltratados, de los humillados.

¿Eso no es la revolución?

¡Pero qué tonterías dice usted! Sería una revolución con las únicas armas masivas válidas del voto. Es más, la derecha se acojonaría.

No lo creo. La derecha está en los intersticios de España. No van a soltar la presa ahora. Y hablarán de un nuevo Frente Popular, recordando tiempos preguerreros, ya lo han hecho.

Eso es otra tontería. Para frente popular el de ellos, que aglutinan desde la derecha extrema hasta un falso centro, incluyendo neoliberales, teaparties, católicos, corruptos, toda la gente de orden.

Eso. Eso, el orden. El orden que ellos añoran y quieren reimplantar. Hasta ha habido una señora impresentable que ha acusado al movimiento 15-M de germen de un golpe de Estado. Ven fantasmas por todas partes.

Ahí se ha pasado esa señora. Pero qué desesperaditos están ustedes.

Pues figúrese que hay cientos de miles de ciudadanos, por no decir millones, que dicen que todos, absolutamente todos, los políticos deberían quemarse a lo bonzo.

Calle, calle, que no cunda la idea.

No se preocupe, que no lo harán. No les importa que los que estén ardiendo sean los españoles.

Ahora están con lo de los recortes, recortes sí, recortes no. Pero claro, volvemos al principio, no van a creer a Rubalcaba, que  ha sido miembro de los gobiernos anteriores.

Claro, Rajoy, El Tijeritas,  no estuvo en ningún gobierno, ni en el que también negoció con ETA, ni en el que acercó presos, ni el de la guerra de Irak, que se dice que el elegido era Rato pero Aznar lo descartó porque fue el único que se opuso a esa guerra, ni el de los hilillos de plastilina, ni lo del Yakolev, ni los que llevaron a España a la ruina con el ladrillo, ni el gobierno de la condena judicial por los informativos de TVE, ni el que privatizó casi todo para sus amigos, ni el que congeló salarios, diga lo que diga Rajoy ahora, ni el que subió escandalosamente los complementos de todos los cargos públicos, ni el de ningún avance social. Rajoy está virgen, era un angelito, un inocente pajarillo. Pues sabe qué le digo: que yo creo a Rubalcaba. Prefiero una posible mentira justa a una certeza injusta.

Usted lo que es es un comunista asqueroso. Y un veleta, un día dice que va a votar a IU, y hoy defiende a Rubalcaba.

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La gota del día: La gota de hoy es interna: Un lector, acérrimo defensor del PSOE, mantiene que se debería ¡suprimir el Ejército! para reducir gastos y solucionar la crisis.