El 20-N, pasado mañana, le va a tocar el Gordo al PP, y el 22-D aún no se sabe a quién, pero han aumentado el primer premio a 400.000 euros por décimo. A pesar del muy escaso número de probabilidades, yo creo que la gente confía más en que le toque el Gordo que no que el PP vaya a arreglar lo de la crisis. Porque con la ensoñación de qué haríamos si fuésemos agraciados disfrutamos muchísimo más que con los tenebrosos recortes que anuncian las lugartenientes Cospedal  y Aguirre. Con la primera seremos virtualmente felices durante un mes, y con las segundas tendremos que atarnos los pantalones con un cordel porque ya no nos quedan agujeros en el cinturón. Eso sí, los ricos, como se sabe, usan tirantes.

Por lo que se intuye, estos del PP son los misioneros de España. Pero los martirizados y comidos por los caníbales seremos nosotros y no ellos. En realidad son a la vez misioneros y caníbales, doblan papel y sueldos. Los ministrables ya se aprestan a bailar alrededor del caldero en el que nos van a guisar.

Aunque lo verdaderamente grave es que se haya dejado de hacer el anuncio del calvo. Tenía una música preciosa, era en blanco y negro con gracia, y el calvo estaba magnífico como actor lleno de personalidad. Creaba ilusión. Ahora, si el PP se anima, podría interpretarlo Esteban González Pons, que va a ser portavoz del Gobierno. Qué menos que anunciar la mercancía.

Los españoles invertiremos 3.600 millones de euros en ese sorteo, casi el doble de lo que ahorró Zapatero congelando las pensiones. Y otra cosa gravísima es que el 22-D por la tarde, cuando no nos haya tocado ni chapa, no podremos decir la consabida frase ‘bueno, pero lo importante es la salud’, porque por cuidárnosla nos cobrarán. Y encima se puede asegurar que los miles de ciudadanos, todos, a los que les toque el reintegro lo jugarán en la Lotería del Niño, el Estado siempre gana.

Los españoles saben que la política es una lotería en la que jugamos con el décimo del voto, pero que casi nunca toca. No obstante, juegan, y votan al PP. Aunque Rajoy no sea el calvo. Al PSOE parece que este año no le tocará ni la pedrea. Y luego hay los que no juegan, los abstencionistas, que no saben que si no juegas, no te puede tocar.

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Gota del día: María Dolores de Cospedal:  "Mariano Rajoy no está dispuesto  a recibir órdenes de Europa ni de nadie". ¿Quién lo cree?

Cae otra gota:  "Cayo Lara reprocha al PSOE que dé dinero a la Iglesia".

Empieza a chispear; una tercera gota:  Es capaz, es España, es cambio, es eficaz, es confianza, es ilusión, es previsible, es imprescindible, es futuro, es responsable, es sentido común, es sensato, es necesario, es trabajo, es fuerte, es coherente, es claridad, es concordia, es consenso, es líder, es diálogo, es empleo, es bueno.    ¿A qué no saben de quién estoy hablando?