Puntadas sin hilo

Personas no gratas

 

 

Como muchos de ustedes saben, soy un firme defensor de la presunción de inocencia, aun en las condiciones más extremas y sospechosas. Odio la sospecha, como norma de vida.

Por ello, resulta inconveniente resaltar lo que parecería más adecuado ante las convulsiones morales y dudas de buenhacer que inundan España: ¿Quiénes creen ustedes que son más en nuestro país, los que están imputados o los que no lo están pero deberían estar? Podría arrastrar a respuestas de vileza descalificadora.

Pero eso no impide que, en un juego limpio, podamos hacer o tener una lista de personas que no nos resultan gratas por diversos motivos.

Las mías serían:

Alfredo Pérez Rubalcaba, por ser el mayor derrotado en la historia del PSOE, creerse imprescindible y no renunciar por dignidad política.

Los magistrados del Tribunal Supremo, por creerse ungidos por la Diosa.

Francisco Camps, por tener muy bien asegurado su futuro económico, sea absuelto o condenado.

José Mourinho, por su obsesión por lo portugués, contratando a jugadores de esa nacionalidad, que, salvo Cristiano Ronaldo, no son de primera línea, haciendo un Real Madrid portugués.

José Griñán, por no haberle sabido meter mano en forma al fraude de los EREs andaluces. Según recientísima encuesta, el PP está al borde de la mayoría absoluta en las elecciones autonómicas andaluzas

Javier Arenas, como ave carroñera.

Federico Trillo, intrigante sin escrúpulos.

Los integrantes de Amaiur, por no condenar rotundamente ni el pasado ni el presente de ETA y dejarse querer.

Rouco Varela, por tantas y tantas vidas como han jodido él y los suyos.

Cristóbal Montoro, por disparar a ciegas.

Mariano Rajoy, por no ser previsible y no cumplir su palabra.

Carlos Fabra, una de las múltiples vergüenzas de la Comunidad Valenciana.

Jorge Alarte, por su total y reiterada incapacidad para liderar la oposición valenciana, y por arrimarse a Rubalcaba con la pretensión, imagino, de que le mantendrá si sale elegido. Es una de las causas principales del desastre de Valencia como Comunidad.

Pedro J. Ramírez, por su maestría en la tergiversación interesada.

Rosa Díez, por su viscosidad mental.

Miguel Ángel Fernández Ordóñez, gobernador del Banco de España, por nadar y querer guardar la ropa.

Emilio Botín, por ser tan rico.

Y todos los ejecutivos de Cajas y Bancos, porque se lo han llevado o están llevando en sueldos, complementos variables, prejubilaciones, dietas y planes de pensiones indignantes, con la última y muy reciente obscenidad: el consejero y director general para Latinoamérica del Banco Santander, Francisco Luzón, se retira a los 64 años con una pensión ¡superior a los 65 millones de euros!

 

Pueden eliminar o añadir lo que deseen.

 

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Gota del día: Jueves 19, 17,42 h. Terminó el primer juicio contra Garzón, y quedó visto para sentencia.   Se admiten pronósticos.

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