Pero queremos aliviarlo de injusticias, corrupciones y retrocesos éticos.

Queremos una democracia viva, con posibilidad de ejercerla todos los días, y no permanecer muertos, como nos obligan.

Queremos que los ciudadanos se sacudan su letargo y resignación.

Queremos que ningún proceso judicial tarde más de tres años, por complicado que sea, queremos que se tomen medidas al cabo de esos tres años sin tener que esperar largos años de recursos.

Queremos que el Rey abdique o explicite hasta el más mínimo detalle su actividad y patrimonio.

Queremos poder elegir individualmente a nuestros representantes, y no el bloque o lista que conformen los partidos.

Queremos una educación laica y universal.

Queremos que nadie gane más de diez veces el salario mínimo.

Queremos que el PSOE andaluz se disuelva y se refunde como castigo político por el fraude de los ERE.

Queremos que Catalunya decida.

Queremos que nadie pase hambre, como primera y preferentísima medida de gobierno.

Queremos renegociar la deuda.

Queremos que las mujeres dispongan libremente de sus cuerpos.

Queremos recuperar la sanidad pública.

Queremos más maestros.

Queremos suprimir las jubilaciones millonarias.

Queremos recuperar la Educación para la Ciudadanía.

Queremos suprimir las prebendas contractuales de los ex cargos políticos.

Queremos, al menos, una televisión y una radio públicas e imparciales.

Queremos un periodismo veraz y por tanto honesto.

Queremos desterrar las insidias y calumnias. Queremos que no haya ni un solo insulto en el Parlamento.

Queremos la obligatoriedad de los préstamos bancarios en condiciones aceptables.

Queremos irremisiblemente la dación en pago, no queremos nadie pierda su casa por quedarse sin trabajo y no poder pagar la hipoteca.

Queremos que España vuelva a superar la media europea de gasto en investigación y desarrollo vergonzosamente perdida.

Queremos que rindan cuentas todos los meses.

Queremos que desaparezcan las sicav o sociedades de los ricos, aunque se marchen del país.

Queremos plantarnos ante Angela Merkel.

Queremos que al menos haya un banco público.

Queremos que la justicia sea gratuita, como antes.

Queremos que se supriman las subvenciones a los colegios religiosos concertados.

No queremos un Presidente virtual. No queremos un Presidente que no admite preguntas. Queremos que los periodistas no acudan a sus esperpénticas convocatorias.

Queremos, si no es mucho pedir, unos políticos que cumplan lo que prometen, y si no poder echarlos sin tener que esperar cuatro años. Queremos que no nos mientan.

Queremos recuperar, aunque de momento sea imposible, la presunción de inocencia.

Queremos saber quiénes son los responsables de la deuda gigantesca que nos hipoteca el futuro, y queremos sentarlos en el banquillo.

Queremos que desaparezcan los paraísos fiscales, en donde se ocultan 20 billones de euros, que servirían para quitar el hambre en el mundo. Queremos saber qué españoles tienen su dinero en esos paraísos fiscales.

Queremos ser decentes.

Queremos que se marche Mourinho.

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Gota de BOQUIABIERTO: Le he preguntado a un amigo expertísimo en estos temas que a cuánto calcula que podrá ascender la minuta de Roca Junyent por defender a la Infanta Cristina y me ha contestado que a unos dos millones de euros. ¿Quién los va a pagar?

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Gota IMPROBABLE: Las Juventudes Socialistas piden ‘con más fuerza que nunca’ la III República. Y si el partido les hiciera caso, ¿ganaría o perdería votos?

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INFORMACIÓN PROCESAL DE LA IMPUTACIÓN DE LA INFANTA CRISTINA:

1. Es rarísimo que el Fiscal recurra una imputación, ya que, como sabemos, dicha figura supone simplemente que una persona es acusada en principio de la comisión de un delito y se la cita en buena lógica para que acuda a decir lo que crea conveniente, acompañada de abogado. Por ello resulta muy sorprendente.

2. Pero esto no tiene mayor importancia pues la Audiencia de Palma no necesitará más allá de un mes para resolver el recurso. Tranquilidad, pues.