Porque además enseguida te acusan de demagogo, esa socorrida palabra talismán para cercenar libertades de crítica. Incluso periodistas de élite aspiran a que sea delito, si bien ellos la practican sin rubor.

¿Acaso es demagogia señalar el disparate que ha supuesto la eliminación por el Gobierno del principio de justicia universal, que permite, obliga, a liberar a docenas de narcotraficantes a cambio de acatar los deseos de China y EEUU para no imputar a sus dirigentes por los desmanes cometidos en corrupción y crímenes de guerra? ¿Qué ocurre, que el tráfico de drogas a gran escala ya no es perseguible y sancionable si median otros intereses?

¿Es demagogia recordar el pasado del candidato popular para las elecciones europeas, alguien que lleva en su mochila haberse mofado de los camareros actuales no equiparables a los de antaño que no reclamaban sus derechos y te servían con rapidez y eficacia tostadas con manteca colorá, o que afirmaba que el regadío hay que utilizarlo como a las mujeres, con mucho cuidado porque le pueden perder a uno, o que en España se vive mejor con menos dinero. ¿Es serio presentarlo como cabeza de lista, es demagogia decirlo, es presentable este señor, señorito andaluz, para representarnos en Europa?

¿Es demagogia asombrarse porque el ex consejero de Empleo de la Junta de Andalucía concedió una subvención de 32 millones de euros a la empresa que contrató a su hija, y un asunto capital como la corrupción de sindicatos y políticos andaluces se alarga y alarga en el tiempo sin que se hayan tomado decisiones drásticas ni se hayan dado explicaciones bastantes?

¿O lo es que cualquier imputado en fase de instrucción avanzada pueda ser candidato en unas elecciones siempre que aún no se haya celebrado el juicio¿ ¿O que sigan siendo diputados y consejeros?

¿Es demagogia extrañarse de que IU y PSOE andaluces hayan quebrado su buena relación de gobierno por dar cobijo y nuevo alojamiento a desahuciados que se han quedado en la calle los primero y denunciar trato de favor los segundos por no guardas la lista de espera, y en un acto de autoridad ¿y demagogia? la presidenta Susana Díaz retirar las competencias a IU?

¿Quién es más demagogo en Catalunya, Rajoy, que la quiere tanto, o Artur Mas, que la quiere aún más hasta el punto de no estar dispuesto a respetar la legalidad? ¿Es la legalidad la máxima expresión de la demagogia? ¿Quién es más demócrata, cómo puede variar tanto el concepto de democracia según unos o según otros, según aceptes el derecho a decidir de unos o de todos? ¿Es demagogia la torpe argucia de Rajoy de ofrecer e instar a la reforma de Constitución, sabiendo que no se podrá reformar sin el apoyo del PP?

Sí, resulta muy fatigoso tener una clase política sujeta constantemente al tamiz de la de la desconfianza. Resulta muy fatigoso estar todo el día buscándoles las trampas y encontrándolas. Resulta muy fatigoso estar convencido de que los políticos no merecen la presunción de inocencia. Y además es demagógico.

¿Será demagógico creer que el PP tenía una caja b para financiarse y enriquecer a sus directivos?

¿Es demagogia reflejar la realidad y el descontento social?