Asuntos & cuestiones

Hermanados con Georgetown

Cuando se publicó que el Gobierno superpatriota de Aznar subvencionaba una universidad privada americana mientras se recortaba el presupuesto de la universidad pública española, algunos se dijeron: "Surrealismo". No tanto. Del mismo modo que los críticos sabían extraer lecturas insospechadas de aquellos artistas, los observadores políticos comenzaron a ver el sentido del envío de dinero (uno de ellos de 1.200.000 euros), cuando fueron contratados como conferenciantes de aquella universidad, con un caché estupendo, precisamente, los responsables de los envíos "altruistas". El conferenciante estrella, como muchos recordarán, ya que fue varias veces a recuperar lo invertido, fue José María Aznar, que sorprendió a propios y extraños con unos extraños monólogos que causaban hilaridad en su perfección histriónica, puesto que era muy difícil calibrar si era más ridículo el contenido o la interpretación en aquel inglés macarrónico con un tono fusión tex-mex gay que Cantinflas no consiguió después de años y años de investigación interpretativa. Este genio del humor también demostró serlo de las finanzas, ya que inauguró un nuevo sistema de plan de pensiones para ex-presidentes ávidos de patrimonio que consiste, como hacen los niños americanos con los huevos de Pascua, en ir escondiendo tesoros por ahí fuera y luego, tranquilamente, darse una vuelta por el mundo a recuperar los depósitos. Eso sí, sería de agradecer que el dinero invertido fuera suyo.

Ahora el Ayuntamiento de Madrid, también mientras se recorta el presupuesto de la universidad pública, ha decidido mandar otro dinerillo a la misma universidad, concretamente al equipo de baloncesto, para la cosa de la promoción de la ciudad. Se defienden diciendo que también la junta de Anadalucía subvencionó el maratón de Nueva York, o la Generalitat la película de Woody Allen. Tienen parte de razón, pero seguro que a estos señores del PP les hubiera extrañado que el protagonista de la película, y cobrando un pastón, fuera Montilla. Ese es el tema.

Más Noticias