Buzón de Voz

Le cueste lo que le cueste

Quizás el pasado 14 de julio no se dio el crédito suficiente al anuncio de Zapatero durante el debate sobre el estado de la nación: "Voy a seguir el camino, cueste lo que cueste y me cueste lo que me cueste". Se comprometió a abordar las reformas y ajustes que considera imprescindibles para que España salga de la crisis económica, aunque ese camino resulte contradictorio con buena parte de los mimbres ideológicos del discurso socialista. Y no se cansa Zapatero de cumplir ese compromiso. Tras los duros recortes del gasto público y una reforma laboral que rompe los lazos con los sindicatos, ahora se trata de tener lista con urgencia la reforma del sistema público de pensiones. Y no vale al parecer otra reforma de las pensiones, sino que ha de ser una reforma que guste no sólo a PNV o a CiU o a Coalición Canaria (incluso al PP) sino sobre todo a los organismos internacionales, a Alemania como guardián de la ortodoxia liberal y en resumen a los mercados financieros que sustentan las necesidades económicas del Estado.

Esa reforma podrá contar con el respaldo de grupos conservadores, pero difícilmente con el de la izquierda parlamentaria, como se comprobó anoche en la Comisión del Pacto de Toledo. Esos grupos minoritarios suponen para el Gobierno una presión infinitamente menor que la de los inversores o las siniestras agencias de calificación. Así que la reforma se hará, "cueste lo que cueste".

Más Noticias