Cartas de los lectores

25 de agosto

Rajoy y sus propuestas sin concreción
Desde que Dolores de Cospedal dijo que el Partido Popular era el que mejor defendía los derechos de los trabajadores, estábamos esperando con impaciencia e ilusión la batería de medidas que concretara dicha defensa. En su lugar, ha llegado lo siguiente: según nos avanza Mariano Rajoy, cuando él gobierne hará una reforma laboral, no sobre el despido, sino sobre el empleo.
Visto el hercúleo esfuerzo de concreción realizado, se puede decir que ha merecido la pena esperar. Si bien, con el debido respeto, observo una excesiva influencia de Petete, de la que sería aconsejable ir huyendo poco a poco si quiere profundizar en la materia.
Enrique Chicote Serna/ Arganda del Rey (Madrid)
Cuando faltan argumentos, siempre quedan insultos
Las candidaturas para la Alcaldía y la Comunidad de Madrid, en curso de formalizarse en el PSOE, están creando un ambiente de tensión y de nerviosismo en el Partido Popular, reflejo de sus implicaciones e imputaciones por un juez en un vasto sumario de corrupción.
Es una perversión descalificar a Trinidad Jiménez por su acento andaluz. Se les olvidan Manuel de Falla, Juan Ramón Jiménez, Rafael Alberti y otros muchos andaluces cuyos acentos, lejos de descalificarlos, aportaron belleza a su forma de expresarse. Al mismo tiempo, descalificar a Jaime Lissavetzky por su apellido es tan ruin como xenófobo, pero ya sabemos que el listón de los disparates del PP está muy alto.
Pedro Taracena Gil / Madrid

Se están riendode todo el mundo
Mientras la clase política española –liderada en esta ocasión por Juan Soler, portavoz adjunto del PP en la Comunidad de Madrid– se tira los trastos a la cabeza por sus desafortunadas declaraciones sobre el acento andaluz de Trinidad Jiménez, en nuestras ciudades se acentúa la necesidad de una nueva clase política que deje de utilizar nuestro país como un mal patio de vecinos en donde todos se insultan por las ventanas mientras el gran edificio, llamado España, sufre importantes deterioros y nadie es capaz de afrontar con valentía las reformas necesarias.
No podemos, ni debemos, seguir viviendo a expensas del esfuerzo político de los años de la Transición. El edificio necesita obras urgentes, pero estas no pueden ser realizadas por unos albañiles viejos y acomodados. Y sobre el acento andaluz, simplemente recordar a los discípulos de Javier Arenas que "el que siembra errores, recoge catástrofes."
Pedro José Narváez Benítez y Juan Manuel Canle Durán / Cádiz

Los banqueros de hoy y los albañiles de ayer
El buen banquero ha sido siempre aquel que, consciente de que administra dinero ajeno, concede créditos con prudencia y rigor. El malo es aquel cuya avaricia le lleva a incrementar el negocio a toda costa para tener más beneficios.
En los últimos años, algunos bancos y muchas cajas no han tenido la prudencia necesaria a la hora de conceder créditos, costando su rescate mucho dinero al erario público. Ahora habrá que esperar a ver qué ocurre con los préstamos que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) está dando a varias cajas. Si la crisis sigue y con tipos de interés tan altos, alguna de estas entidades no podrá devolver el préstamo. Lo que todavía no está claro es por qué los responsables de esta mala administración de dinero ajeno no han terminado en manos de la Justicia.
Pedro Morante Gutiérrez / Elche (Alicante)

Las amenazas del PP no se pueden permitir
Uno de los pactos de la Transición consistió en que los partidos con mejores opciones para gobernar asumían el compromiso de no repetir la irresponsable inestabilidad política del siglo XIX español, provocada por la promulgación y derogación sucesivas de leyes que unos y otros, alternativamente, aprobaban y suprimían.
Algunas voces del PP anuncian la derogación de la nueva –y mal llamada– Ley del Aborto si vuelven a gobernar en 2012, aunque esperan no tener que hacerlo, confiados como están de que el Tribunal Constitucional resolverá a su favor el recurso que han interpuesto contra algunos artículos de esta ley. Si el alto tribunal, por el contrario, sentenciara a favor de la ley, ¿nos encontraríamos con una nueva deslealtad institucional del PP, derogando la norma aprobada en ejercicio de la voluntad popular de los ciudadanos en 2008?
Francí xavier muñoz sánchez / Madrid

La solidaridad debe ser duradera
Cuando las grandes catástrofes naturales llegan a nuestras televisiones, nos sentimos culpables, nos entristecemos levemente y sacamos nuestra solidaridad a relucir. Pero la gente que las padece, como la población de Haití o Pakistán, lleva así, muriéndose de hambre, desde hace muchos –demasiados– años. Sin embargo, cuando aparecen en nuestros salones, es cuando les prestamos atención. Dentro de poco, los medios se olvidarán nuevamente de ellos y nosotros también. Sólo tenemos que apretar un botón desde nuestros cómodos asientos para dejar de ver esta dura realidad.
Desde este lado del mundo, desde nuestro privilegiado rincón, deberíamos comenzar a prestar atención a nuestras más que ventajosas condiciones, a apreciar lo que tenemos y a no practicar el ejercicio de la queja con tanta ligereza y trivialidad, llevando la solidaridad siempre con nosotros.
Beatriz García Serrano Candás (Asturias)

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