04/10/200803/10/2008

Un dolor que avanza
Como un dolor que avanza. Como un brote de desesperanza que prende en el páramo de la memoria. De esta forma tan desencarnada y progresiva, se extiende la violencia por el suelo de los estados mexicanos.
Asesinatos, genocidios indígenas, secuestros... estas y muchas otras son las formas de violencia infringidas contra su pueblo. Y todo en un clima de corrupción política, judicial y policial que sirve de abono a la proliferación del narcotráfico y el crimen organizado.
El régimen pseudodemocrático de su Gobierno ha beneficiado las desigualdades sociales y la extrema pobreza de gran parte de su población. El acoso contra movimientos sociales y sindicales ha hecho imposible que millones de desfavorecidos
abandonen esa miseria.
Lo último, nueve ejecuciones que se suman a la montaña de cadáveres que, cada día, aparecen torturados y ejecutados. En ciudad Juárez, el exterminio es fundamentalmente femenino: miles de mujeres son raptadas, violadas y asesinadas sin que los poderes del Estado muestren el menor interés en ello. Las comunidades de Chiapas o Guerrero son objeto de un genocidio orquestado exclusivamente para arrebatar las tierras a sus legítimos pobladores y explotar el medio para lucro de unos pocos. Aquí, la lista de asesinatos, secuestros y asaltos a la población indígena señalan directamente a grupos paramilitares que actúan para servir a los intereses del propio Estado.
Este terrorismo de Estado ejercido por un Gobierno que obtuvo un triunfo poco claro y escasamente democrático no es otra cosa que el instrumento que utiliza el poder para saquear y cosificar a sus ciudadanos.
La comunidad internacional debería dejar de reconocer al Gobierno mexicano como un régimen democrático. No debe haber tibieza frente al terror ejercido contra el pueblo.
Antonio Martín Cascán / Zaragoza

Un cortometraje por la memoria
Esta semana, he podido conocer una historia como miles que habrá a lo largo de los casi 40 años de represión franquista en nuestro país.
Esta historia nos cuenta en unos minutos un hecho que se repitió durante décadas. El nombre de sus protagonistas es el nombre de todos los que padecieron la represión, las torturas y vejaciones, las mismas que padecieron el resto de víctimas inocentes. El nombre de sus verdugos es el mismo de los que hoy no quieren reconocer ni a las víctimas ni los hechos de injusticia que padecieron.
Esta historia nos tiene que enseñar a reconocer los hechos, a trabajar juntos para que no se vuelvan a repetir, y para eso tenemos que poner nombre y apellidos a todas las víctimas de la dictadura franquista, tenemos que recordar a todas y cada una de las víctimas inocentes, y lo tenemos que hacer desde la razón y el corazón, y no desde el odio, el miedo o el rencor.
El corto A golpe de tacón nos enseña la supervivencia, el compañerismo, la humanidad y la lealtad a la vida y al amor, pero también nos describe lo que es capaz de hacer el odio, el miedo y el rencor.
Raúl Santiago García López / Santander

Incidente

Hace unos días, tuve un incidente con un agente municipal al que, por su lamentable comportamiento, llamé inepto. Molesto por el calificativo, me pidió el DNI para denunciarme por insulto a la autoridad (sic) advirtiéndome de que ya tendría noticias del juez.
Al cabo de unas semanas, recibo una citación judicial por desobediencia a un funcionario público (más sic) adjuntando la denuncia.
Quedé perplejo al leer la cantidad de falsedades con las que ha tenido el cinismo acusarme, firmadas con la complicidad de un compañero del servicio –que, por cierto, no presenció el incidente– atribuyéndome una actitud que en nada se corresponde con la verdad y poniendo en mi boca toda clase de insultos para hinchar la acusación como venganza por mi personal diagnóstico.
Porque estamos donde estamos y con quienes estamos, la sentencia ya es más que previsible. Entre la palabra de un agente de la autoridad y la de un ciudadano acusado por una falsa denuncia, es más que probable que quien va a salir perdiendo siempre es el que no gasta porra.
De ahí la miserable actitud de quien, abusando de su condición de funcionario público, se permite la bajeza de denunciar en falso, cometiendo un delito que debe de estar muy cerca de lo que se denomina corrupción policial y que deshonra el uniforme del cuerpo al que tan lamentablemente representa.
De momento.
Jordi S. Berenguer / Barcelona

Deporte especial
En primer lugar, quiero felicitar a todos los deportistas olímpicos que han formado parte de la selección española en los últimos Juegos Olímpicos de Pekín e, igualmente, a todos los deportistas paralímpicos españoles que también han participado en esos Juegos.
Felicitar a todos a los que han conseguido medallas y a los que no. ¡Enhorabuena por vuestro esfuerzo y
vuestro trabajo!
Pero ahora quiero hablarles de otros deportistas, los que no han participado en los Juegos, pero que practican deporte regularmente y superan dificultades a diario. Son los deportistas con discapacidad intelectual. 117 de esos deportistas formaron parte de la delegación española que participó en los Juegos Mundiales Special Olympics en Shanghai
en el año 2007.
También ganaron muchas medallas.
Este año, del 8 al 12 de octubre, justo después de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, 1.500 deportistas con discapacidad intelectual de toda España y de 18 países europeos participarán en los Juegos Nacionales Special Olympics que se celebran en España, en Castellón.
¡Los deportistas con discapacidad intelectual existen! Por favor, no se olviden de ellos.
Enric Blesa / Director Nacional Special Olympics España / Barcelona