Culturas

En la fiesta de Blas

¿SOY YO O ES LA GENTE? // ANTONIO OREJUDO, escritor

Lars Vilks es el autor de aquellas viñetas en las que Mahoma aparecía con cuerpo de perro. El chiste no hizo gracia, y uno de Al Qaeda puso precio a su cabeza: 72.000 euros, que te sacan de un apuro. Vilks se cambió de casa y de ciudad, pero afortunadamente no se amilanó y ahora está preparando un musical tipo ‘Jesucristo Superstar’ sobre la vida del profeta.

Grotesco, estrafalario y extremista
Me pregunto si Vidal-Quadras tendrá el mismo coraje que Lars Vilks y será capaz de montar un musical sobre Blas Infante, después de lo que ha pasado. El eurodiputado del PP dijo el pasado 28 de octubre que Blas Infante era entre otras cosas un "cretino integral". Blas Infante fue un notario de izquierdas, inspirador del nacionalismo andaluz y fusilado en 1936, que ha sido canonizado como Padre de la Patria Andaluza en el preámbulo del nuevo Estatuto de Autonomía. Damos por hecho que Vidal-Quadras no lo conoció personalmente y que su descalificación se refiere a su dimensión pública, a sus ideas sobre el nacionalismo andaluz.

Fatwa
PSOE, IU y el Partido Andalucista han aprobado en el Parlamento andaluz una proposición para que Vidal-Quadras renuncie a su acta de eurodiputado. En Casares, el pueblo natal de Blas Infante, lo han declarado persona non grata y no ha faltado quien haya propuesto prohibirle la entrada al territorio andaluz. El PP ha dicho que no está de acuerdo con Vidal-Quadras y que el partido respeta la figura de Blas Infante. Pero esto no ha sido suficiente para Manuel Chaves. El Presidente regional quiere que el PP tome "medidas serias" y exige una "sanción política". Me pregunto qué precio le pondría yo a la cabeza de Vidal-Quadras. ¿72.000 euros estaría bien?

Todo el mundo salía con unas cuantas copas de más
En la calle no hay rastro de esta polémica. Como lo del Estatuto, esto es cosa de Juan Palomo. Los únicos que se hincan de hinojos y se abren el pecho son los cuatro políticos de siempre, especialmente los socialistas con su presidente a la cabeza. Para la gente normal Blas Infante carece de importancia. El peligro es que a fuerza de salir en la tele hipando por la dignidad ultrajada, estos cuatro irresponsables extiendan la caspa entre nosotros. Y la caspa es inflamable. Tras una carrera política sin grandes altibajos, Chaves quiere pasar a la historia por haber hecho de Andalucía una región paleta, integrista y tenebrosa, donde ya ni siquiera se pueda opinar. Pero no hay que permitírselo. Como Lars Vilks, no hay que amilarse. Vamos a por el musical.

Más Noticias