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La sociedad del futuro

Álvaro Gaertner Aranda
Miembro del Círculo 3 E de Podemos

Decía Margaret Thatcher en una entrevista en 1981 que las medidas económicas que estaba tomando no eran sino un medio para cambiar los puntos de vista y para cambiar el alma y el corazón de la nación y de sus habitantes. Creo que debemos tener esta frase muy presente a la hora de analizar todas las propuestas que nos van a llegar durante este periodo de campaña electoral, porque detrás de ellas siempre hay una idea de la sociedad que se quiere construir a traves de esas medidas.

De esta manera, cuando vemos medidas como el contrato único propuesto por Ciudadanos, la reforma laboral que hizo el PP, las reformas educativas que pretenden convertir la educacion en una fábrica de trabajadores y otras medidas parecidas, no debemos pensar solo que pretenden formar borregos que sepan hacer su trabajo y que no piensen si el modo en que esta organizada la sociedad es bueno o malo, sino que debemos pensar tambien que son pasos fundamentales para lograr la sociedad de mercado que quieren conseguir, en la que todo se pueda comprar o vender de acuerdo a la ley de la oferta y la demanda. El sentido crítico, el saber leer entendiendo y analizando lo que se lee o el conocimiento de la historia para saber que errores no hay que repetir no son cosas que se puedan comprar o vender, y por ello van perdiendo peso frente a materias como las matemáticas, la física o la tecnología o asignaturas de nueva creación como Iniciativa Emprendedora, que son materias que permiten incrementar las habilidades técnicas que, según su visión, los trabajadores del futuro necesitaremos para estar adaptados a las demandas del mercado laboral. A través de estas medidas ellos piensan que estaremos más cerca de ser esa utopía neoliberal que Monedero llama ser empresarios de nosotros mismos y también estaríamos más preparados para serlo. Esta seria la clave de bóveda de su proyecto político, que todo, incluyendo las cualidades humanas, se pudiese comprar y vender de acuerdo a la ley de la oferta y la demanda sin ninguna intervención que pudiese alterar el normal funcionamiento del mercado.

Por otro lado, cuando analizamos las medidas del programa electoral del PSOE, hay que tener muy presente la contradicción que tienen los socialdemócratas de todo el continente desde que aceptaron el neoliberalismo y pasaron a ser socioliberales. A través de esta aceptación del postulado liberal de la sociedad de mercado se puede entender por qué no quieren derogar la última reforma laboral, cuyo objetivo último no es otro que el de producir un mercado de trabajo menos regulado en el que lo único que importe a la hora de fijar las condiciones laborales sea la oferta y la demanda de trabajo, con el equilibrio de fuerzas favorable a los empresarios que ello conlleva. Pero por otro lado, pese a esta aceptación de la sociedad de mercado, siguen teniendo tics socialdemócratas y siguen sabiendo que, como indicaba Polanyi, la transformación exitosa de la sociedad en una sociedad de mercado acabaría con la propia sociedad, y por eso plantean medidas como el tipo mínimo del Impuesto de Sociedades o la recuperación de los impuestos de Patrimonio y Sucesiones que para los fundamentalistas del mercado no son sino intervenciones del Estado que pueden disminuir la motivacion de todos los empresarios de si mismos para ganar dinero y crear riqueza para la sociedad. De esta manera, al desgranar las medidas del programa del PSOE podremos ver que muchas de ellas se contradicen entre ellas y que si se aplicasen en un programa ideologicamente coherente darian lugar a sociedades muy diferentes.

Por ultimo, al estudiar las medidas del programa de PODEMOS habra que tener en cuenta las contradicciones que tenemos entre nuestra idea de sociedad y las medidas socialdemócratas que creemos que se pueden llevar a cabo en los próximos 4 años. De esta manera, mientras que para bastantes miembros de PODEMOS nuestra idea de sociedad incluye que todos los ciudadanos tengan un derecho a la existencia que se garantizaría a través de la Renta Básica para estos 4 años creemos que nos tenemos que conformar con una renta mínima garantizada, que no deja de ser una medida que palia los efectos del capitalismo pero no combate la filosofía que lo sustenta. Muchos de nosotros interpretamos esto como un paso reformista que puede ayudar a cambiar el sentido común hasta que un día el derecho a la existencia se reconozca y se pueda aplicar la renta básica. De la misma manera, pese a que la idea de muchos de nosotros sobre la sociedad incluye medidas como el reparto del trabajo y la reducción de la jornada laboral conforme aumenta la productividad para que todos tengamos trabajo sin necesidad de que se incremente la producción indefinidamente, creemos que la sociedad no esta en ese estadio todavía y que mientras trabajamos para que lo este hay que tomar medidas que protejan a los trabajadores como la derogación de las reformas laborales y la subida del salario mínimo. En definitiva, en bastantes medidas de nuestro programa y en varias de sus ausencias se notara la contradicción entre nuestro deseo de una sociedad que podríamos llamar de la vida buena, que creo que compartimos con IU, en la que como predecia keynes se trabajase 15 horas semanales en 2030, en la que todo el mundo tuviese su derecho a la existencia garantizado y pudiese ser libre para organizar su tiempo como mas le gustase y en la que cuidasemos el planeta para que las generaciones futuras pudiesen disfrutarlo como nosotros, y el programa electoral que presentamos que contiene los primeros pasos que creemos que son necesarios para transformar la sociedad hasta llegar a esa sociedad de la vida buena.

Por todo esto, una vez esbozados los distintos modelos de sociedad de los distintos partidos creo que cada uno de nosotros tendrá que decidir en que sociedad quiere vivir, y consecuentemente dejarse la piel en la campaña que viene para que ese sea el modelo que triunfe.

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