Fuego amigo

ETA contra el ZAR

Cuando el presidente Rodríguez Zapatero dijo que el proceso de paz iba a ser un camino largo y difícil, los más optimistas colocaban el horizonte de la paz definitiva en unos días cercanos a las próximas elecciones en Euskadi para facilitar, de paso, que una renovada Batasuna pudiera concurrir a los comicios con plenos derechos. Eso, los más optimistas. Los pesimistas auguraban que el proceso se dilataría al menos un par de legislaturas, entre zancadillas desde la derecha y la izquierda.
Yo debo confesaros que unos días estoy en el primer grupo, otros, en el segundo, y a veces, como hoy, en el grupo de los que piensan que esto no tiene remedio. Recuerdo el día en que ETA anunció el "alto el fuego permanente", con esa manera tan suya de retorcer las palabras para acabar no diciendo lo que en realidad quiere decir. La extrema derecha que apacienta los sentimientos de la derecha española encajó la noticia como uno de los mayores disgustos de su vida, porque la paz es el fracaso del beligerante, la jubilación del patriotero. Cuando a la izquierda se le murió Franco ("contra Franco vivíamos mejor"), un sentimiento de alegría pugnaba al mismo tiempo contra la desilusión de que el asesino hubiese muerto en la cama, torturado con el encarnizamiento terapéutico, eso sí, aplicado por el yernísimo Marqués de Villaverde que veía en la desaparición de su suegro el final de sus privilegios. Muchos hicieron un alto en su agnosticismo para rezar por que la agonía fuese eterna. En cierto modo, el Marqués nos vengó a todos sin pretenderlo.
Esa mala buena noticia que tanto desasosiego trajo al ZAR (Zaplana, Acebes, Rajoy -hay otra versión, ZARA, en que la última A se refiere a Aznar, pero ya roza la publicidad encubierta-) se les va suavizando según ETA abre su bocaza para trasladar la desilusión al resto de los españoles que pensábamos que la mesa de negociación se nutriría con propuestas asumibles por la mayoría de los españoles. Un día nos golpea el ZAR y otro ETA, ambos pidiendo abiertamente lo imposible, en un estúpido diálogo de sordos y ciegos. Porque el último comunicado de ETA es una provocación manifiesta, como si dentro del seno de la organización terrorista conviviesen las siniestras imágenes especulares de una Esperanza Aguirre y un Ruiz Gallardón con boina y pasamontañas.
Seguir apostando "por el proceso de paz" para a continuación pedir que los jueces dejen de hacer su trabajo y mantener, además, que su exigencia de una Euskadi independiente es innegociable, es dar pábulo a la derecha de que semejante negociación sería abiertamente una "mesa de rendición". Sabiendo que comunicados como el de ayer no sólo no sosiegan los ánimos, sino que los exacerban, para gran contento del ZAR, me lleva a pensar que todavía no está muy claro quién es el interlocutor de ETA con la suficiente autoridad moral como para imponer el resultado de las negociaciones a toda la organización.

En realidad, todos estamos pillados por los huevos. Desde los grandes atentados del 11-S y el 11-M, ETA sabe que sólo puede huir hacia adelante, que el terrorismo se ha quedado sin glamour, que es una forma de lucha desprestigiada, que ha perdido para siempre el aura revolucionaria, pasando a ser en el inconsciente colectivo una manifestación pura de la barbarie. Por su parte, la extrema derecha española no puede seguir dando el espectáculo, tan evidente, de que la paz sería el fin del ZAR, que pasaría a la historia como el único partido que quiso evitar la desaparición del terrorismo etarra, con el fin vergonzoso de que su contrincante no se beneficiase de los votos de acción de gracias de la ciudadanía.
Y el gobierno lo tiene crudo y tiene prisa. Y las prisas son malas consejeras.
---------------------------------------------------------------------------------------
(Meditación para hoy: el hombrecillo insufrible, ex presidente del Gobierno y presidente de la Fundación FAES, ha sido nombrado miembro del Consejo de Administración de News Corporation, la empresa propietaria, entre otras, de la cadena de televisión norteamericana Fox News, el púlpito más retrógado de la extrema derecha de aquel país, aliado de Bush hasta la náusea en su campaña a favor de la intervención en Irak. ¿Qué hace un hombre como él, centrista reformista de toda la vida, en una cueva de ultraconservadores comandados por el señor Murdoch? ¿Será desde ahora la FAES (Falange Española) la encargada de transmitir directamente los recados del emperador americano al nuevo emperador español, el ZAR?

Más Noticias