Planeta Axel

Feindouno hizo lo mejor y lo peor

Es lo que tienen los pequeños genios. Pascal Feindouno, ese media punta que anotó con dieciocho años el gol que le dio la liga del 99 al Girondins de Burdeos y al que ahora disfrutan todas las semanas en Saint-Etienne, fue el gran protagonista en el triunfo de su selección guineana ayer ante Marruecos (3-2). Participó en los tres goles de su equipo, pero luego se autoexpulsó con una agresión que puede ser determinante de cara al futuro de la competición.

Guinea, que ya fue cuartofinalista en las dos ediciones anteriores de la Copa África, volvió a mostrar la alegría en ataque que no le habíamos visto en el partido inaugural ante Ghana. Con Youla arriba, Mansaré en la izquierda, Ismael Bangoura en la derecha y el gran Feindouno por detrás, el equipo de Nouzaret siempre dio sensación de peligro cuando recuperaba el balón y salía a la contra. Todo lo contrario a un equipo marroquí que, con Chamakh incomprensiblemente en el banquillo, era incapaz de traducir su dominio en oportunidades claras de gol.

Feindouno empezó a decidir el partido con un lanzamiento de falta magistral (11’) y casi lo sentenció con su pase en profundidad a Bangoura en el 2-0 (59’). Luego tuvo la frialdad para transformar con clase el penalti cometido sobre Youla (63’), justo después del golazo de Aboucherouane que parecía meter a los marroquíes en el partido (60’). Pero en el 67’ cometió una torpeza, fue expulsado y dejó en inferioridad a los suyos, que acabaron pidiendo la hora tras el tanto de Ouaddou (90’). Lo peor de todo para Guinea es que probablemente le caerá más de un partido de sanción –contra Namibia no estará seguro-, por lo que sería baja en un hipotético cruce de cuartos de final.

Más Noticias