El té chai es uno de los emblemas de la India. Tras probarlo, el viajero se siente capturado por sus aromas. Es por la mezcla de especias y hierbas, por su característica escalinata de sabores, y por esa vitalidad que se enmascara en la suavidad de la forma. Bebida de las clases populares, encuentro agradable en los abigarrados trenes con vendedores ambulantes, el masala chai (mezclas del té), si seguimos con las metáforas, es una forma de yoga, un ejercicio de los sentidos, una amplitud de horizontes...

No tiene una receta fija, como toda obra alquímica que se precie. Es casi imposible reproducirla en la totalidad de su mantra en Occidente, lo cual no excluye que podamos hacer nuestras pruebas caseras. Básicamente consiste en una mezcla abigarrada de especias con té negro (aunque cabe también el té verde), con agua y leche de vaca o vegetal. El té alcanza en el masala otra dimensión, ¿se convierte en un postre, un plato, una delicia, un templo...? Hoy en algunos supermercados o tiendas especializadas lo venden en sobres preparados. Pero si tienes acceso a las especias, vale la pena intentarlo en casa.

Receta de té chai indio casero

• Agua.
• Leche vegetal o de vaca.
• Hojas de té negro o verde.
• Especias: clavo de olor, vainas de cardamomo, ramita de canela, jengibre en polvo o fresco, anís estrellado o semillas de anís, azúcar integral.

Elaboración:

Básicamente, debes hervir las especias en agua. Pártelas o pícalas un poco para que desprendan mejor su sabor. Después añades el té (calcula en función de las cantidades que quieras sacar). Puedes acompañarlo de leche y de azúcar. Debe servirse, preferentemente, caliente. A veces le echan canela o cardomomo molido como decoración.

1. Hierve las especias en agua y añade el té:

En una olla, añade tres tazas de agua, dos clavos de olor, media rama de canela, una cucharadita de jengibre, media cucharadita de semillas de anís o una pieza de anís estrellado, y cuatro vainas algo abiertas de cardamono. Llévalo a ebullición durante unos 15 o 20 minutos, a fuego lento. Después añade dos cucharaditas de té y deja que infusione durante unos cinco minutos, ya retirado del fuego. Luego añade una taza de leche caliente y azúcar. Remuévelo. Cuela la mezcla y sirve el chai en tazas o vasos.

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