Este pasado fin de semana, tuvieron lugar dos caravanas de "animales" de signo y motivos bien distintos.

Por un lado el programa El Intermedio de la Sexta organizó una Caravana de Palomos Cojos a la ciudad de Badajoz. Esta loable iniciativa tenía como fin ridiculizar las declaraciones homófobas del Alcalde de Badajoz, del Partido Popular, Miguel Celdrán que, durante una tertulia de la COPE, afirmó que en Extremadura  a "los palomos cojos (término despectívo que se ha usado siempre en toda España para ridiculizarnos a los homosexuales, como da fe la magnífica novela El palomo cojo de Eduardo Mendicutti) los echamos para otro lado, porque aquí estamos todos muy sanos". Yo personalmente habría organizado esta caravana a la casa de Luis del Val que fue el homófobo que, muy maliciosamente, hizo la pregunta "¿Y palomos cojos hay muchos?", cuando el alcalde de Badajoz estaba contando con gran orgullo su afición a los palomos. Y desde luego otra a esa gran plataforma de la homofobia que es la COPE, emisora homófoba como pocas. Pero Wyoming vio, con acierto, más potencial en una peregrinación a la ciudad extremeña a la que se apuntaron todo tipo de plataformas y ciudadanos gays y gayfriendly. En cualquier caso, esta iniciativa compensa algo el desatino que cometió El Intermedio cuando buscó a un reportero gay bajo el desacertado (y muy homófobo) lema: Saca a la rubia que hay en ti. Es lo que suele pasar cuando uno viene de la vieja escuela del humor, acostumbrada a atacar al diferente (mujeres, homosexuales y extranjeros, principalmente) reduciéndolo al estereotipo insultón. Pero esta vez se consiguió mostrar una evidente concienciación y solidaridad ciudadana con la diversidad sexual y la libertad. Yo podría intentar calibrar el valor de la presencia de esas más de 10.000 personas que abarrotaron la Plaza Alta de Badajoz o de la actuación del maravilloso (y muy perseguido por los estereotipos homófobos) Falete, pero creo que es mejor dejar hablar a uno de mis ídolos: el activista homosexual cacereño David Santos Holguin. David no sólo es un valor en alza en el PSOE, sino que cofundó la primera asociación LGBT en la Universidad de Extremadura llamada Asociación Juvenil T-Entiendo, consiguió que, gracias al compromiso de Fundación Triángulo, el Ayuntamiento de Cáceres y el apoyo del gobierno socialista, ondease por primera vez en la historia de la ciudad la bandera del arcoíris, teniendo el honor de instalarla en la fachada del consistorio él mismo, un año más tarde era elegido vocal de Intercentros y Diversidad Afectivo Sexual para el Consejo de Estudiantes de la Universidad de Extremadura, siendo la primera vez que se crea una vocalía relacionada con LGBT, pero quizás su iniciativa más querida sea su blog Trece Rosas Rojas. En esa bitácora, en una entrada acertadamente titulada Yo soy un palomo cojo, David valoró con increíble lucidez toda la polémica del alcalde y la caravana. Os recomiendo no sólo la lectura del magnífico artículo sino de todo su blog y me quedo con este párrafo:

Este comportamiento despectivo hacia los homosexuales no es nuevo en el comportamiento del señor Celdrán. En 2007 el Alcalde de Badajoz (PP), en un debate con el Concejal de IU, Manuel Sosa, dijo que "a las cosas hay que llamarlas por su nombre, y si no eres una maricona". Una persona de estas características debería estar fuera de la vida pública de forma inmediata, máxime cuando el artículo 7.13 del nuevo Estatuto de Autonomía obliga taxativamente a los poderes públicos a promover políticas para garantizar el respeto a la orientación sexual y a la identidad de género de todas las personas.

Es un honor tener a personas como este joven estudiante en nuestras filas y todo un ejemplo de activismo, solidaridad y buen quehacer (sí, encima es guapo y simpático). Por supuesto, no podemos olvidar a nuestra querida Fundación Triángulo, que fue la que consiguió que el alcalde de Badajoz pidiese disculpas. Nos gustaría que estos representantes de nuestra comunidad fuesen los que acaparasen las cámaras de televisión, pero por ahora nos tendremos que conformar con la acción de El Intermedio. Gracias.

Por otro lado, en Madrid la derecha más ultramontana, encabezada por el Partido Popular y aledaños (Rosa Díez, ¿cuánto te vas a arrastrar para arañar unos votos?), organizaba una especie de Caravana de carroñeros que, sin ningún respeto hacia las víctimas de ETA que han sido asesinadas brutalmente por la banda terrorista en las últimas décadas, intentaba aprovecharse de esa desgracia para ganar unos votos y atacar al gobierno que más cerca está de acabar con la violencia de la banda terrorista.

No comprendo por qué los familiares de esa víctimas permiten que se politice tan sectariamente su causa y dan cancha a organizaciones con oscuras intenciones como los Peones Negros (de nuevo en la manifestación) que lo único que quieren es poder y visibilidad para llenarse los bolsillos y el ego.

Para mí la gran desgracia fue ver cómo la organización gay COLEGA se sumaba a este acto manipulador y se paseaba entre homófobos con una bandera gay rematada con una estrella de David (en alusión a su demencial apoyo a las acciones violentas de Israel, que no a los gays israelíes, en Gaza). Pero de COLEGA y su traición a todos nuestros intereses hablaré en otra ocasión. ¡Qué perdidos estáis! Casi tanto como los familiares de las víctimas de ETA que no ven que están jugando con los cadáveres de sus familiares. Aprovechando hasta su memoria. Pero es lo que hacen las bestias carroñeras: devorar cadáveres para engordar su panza.