"Justo cuando pensabais que España no podía producir éxitos para televisión por sí misma, tres novatos amenazan el dominio de Hollywood en el prime time". Esta frase la podría haber escrito más de un bloguero, pero resulta que viene ni más ni menos que de Variety, una de las biblias de la Meca del arte audiovisual, la Jerusalén de la ficción, el Disneylandia de... er... de las... cosas de Disney.

También hay que subrayar que este hombre, John Hopewell (Juan Esperoquebien) no ha debido oír hablar nunca de Gran Hermano, Supervivientes, El internado, Los hombres de Paco o Aída. Vean el ingenuo (por decir algo) análisis que hace de los estrenos más exitosos de la ficción patria en esta temporada:

• Águila Roja. Contra la angustia de la recesión, la fantasía de una España tan fuerte que tiene su propio justiciero enmascarado. Luego las cejas de Aznar no les engañaron en ningún momento, amigos. En cualquier caso, ¿tener un vigilante de este tipo es símbolo de opulencia?
• Doctor Mateo. Dentro del género que Hopewell define como "buen rollo" (feel-good), destaca que todo el mundo tiene trabajo en la serie, pero que nadie trabaja demasiado. Y así no se levanta España: "los dos asistentes del médico (sic) dedican la mayor parte de sus energías laborales en practicar sexo en el escritorio del doctor". Pues claro que sí. Con la maquinaria consumista en ralentí, la gente ha vuelto a los entretenimientos tradicionales. Por otra parte, mi colega transatlántico ha vuelto a intentar ver una serie que se ha bajado sin subtítulos y le pasa lo que a mí, que creía que  Lie to me era una comedia.
• Pelotas. De ésta sólo dice que es una comedia de fútbol y sexo. Creo que de Perdidos ha dicho que es una ficción sobre islas y sexo y también que Los Soprano es un drama sobre mafiosos y sexo. Todavía está intentando averiguar de qué va Sexo en Nueva York.

Con este panorama, el pobre redactor flipa, claro. Se pregunta qué pasa con los grandes éxitos de su país y Eduardo García Matilla, de Corporación Multimedia le explica que "la ficción americana ya no está en la vanguardia de la innovación".

Entonces este hombre debe mirar Fringe, Dollhouse, United States of Tara, Mad men, True blood y piensa que ya no entiende nada de televisión.

O de castellano.