Trabajar cansa

Todo se resuelve con un click

"Hasta ahora las nuevas tecnologías eran un apoyo en la educación. A partir de ahora van a ser parte fundamental" -Presentación del programa Escuela 2.0-  

                  

Me parece muy bien que cada alumno disponga de un ordenador portátil y lo utilice en clase: así se les acostumbra el cuerpo a las más de ocho horas diarias que muchos pasarán ante el ordenador cuando empiecen a trabajar. Ya de pequeños se les va haciendo callo, y acostumbran la espalda, los ojos o la cabeza a las típicas molestias que conocemos los que pasamos el día frente a una pantalla. Si además te lo llevas a casa, te resultará menos duro el día que tu empresa te ponga móvil y portátil para que estés siempre localizable y operativo.

Aparte de esto, no encuentro tantas ventajas en el plan Escuela 2.0. Me parece estupendo que la enseñanza se apoye en la tecnología, pero no veo necesario un reparto masivo de ordenadores. Más bien me parece un ejemplo más de algo muy habitual en nuestro tiempo: la confianza totémica en la tecnología.

Tenemos un sistema educativo lleno de problemas, que no resuelven las sucesivas reformas. ¿Se solucionarán con un portátil en cada mesa? No, ni pienso que los responsables lo crean. Pero transmiten una imagen engañosa: que dejamos atrás la vieja escuela analógica y entramos en la era 2.0, donde todo será más fácil, con sólo un click. En realidad los ordenadores son sólo un instrumento, y que sean una ayuda o un desastre depende de todas esas carencias que no desaparecen con el salto tecnológico.

Pero éste es el gran mantra de nuestro tiempo. Si un sector tiene problemas, se informatiza. ¿Qué la justicia va mal? Compramos ordenadores, y Justicia 2.0. ¿Consultas médicas atascadas? Un portátil a cada doctor, y Medicina 2.0. Cualquier día se les ocurre dar un ordenador a cada parado, o a los chicos del botellón. No quiero dar ideas.

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