Trabajar cansa

Reflexiona, pero en silencio

"Los españoles tenemos derecho a una jornada de reflexión; que los ciudadanos no se vean invadidos por ningún tipo de mensaje." -María Dolores de Cospedal, secretaria general del PP-

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Hoy toca reflexionar, para no votar mañana a la ligera. Pero eso sí: hay que reflexionar en silencio, a solas, metido en casa a ser posible. No se vayan ustedes a poner a pensar en voz alta y por la calle, que les tomarán por locos, o peor aún, por antisistema, como esos indignados de Sol y de otras plazas que quieren reflexionar hoy juntos.

En ningún sitio está escrito que no podamos reflexionar colectivamente, y de hecho sería mucho más útil para decidir el voto: confrontar nuestras dudas y certezas con las de los demás. El voto seguiría siendo personal, secreto e intransferible, pero la reflexión previa sería compartida, pública.

Pero no todos opinan igual: la Junta Electoral ha recordado que la jornada de reflexión es cosa sagrada y muy delicada, de modo que cualquier alteración de lo acostumbrado puede violentar nuestra intimidad reflexiva. Hoy no debemos manifestarnos, como los partidos no pueden pedir el voto ni repartir pegatinas. Lo que no quita para que los medios hagan su propia campaña si les place, como hemos visto en anteriores vísperas electorales, y que las calles sigan cubiertas de propaganda. Por eso digo que es mejor quedarse en casa a reflexionar, para que nada nos soliviante.

El carácter sagrado de la jornada de hoy demuestra cómo la democracia –o mejor dicho: esta democracia- tiene un aire de misa solemne y hueca. Lo dice con mejores palabras Rafael Reig en su última novela ("Todo está perdonado", léanla): nos conformamos con una eucaristía (depositar el voto es como comulgar) donde no hay carne, no hay presencia real del pueblo, de modo que todo se convierte en liturgia vacía.

Como toda eucaristía, la del voto requiere recogimiento previo, la jornada de reflexión, que es como la contrición antes de comulgar. Y eso hay que hacerlo a solas, no se te ocurra ponerte en una plaza a debatir con tus vecinos sobre qué hacer mañana, a quién votar. Ya lo dijo el otro día la Junta Electoral: la petición de "voto responsable" puede afectar a la libertad de los ciudadanos al ejercer su derecho. Pues eso.

 

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