Parece que ha sido un siglo y solo ha pasado poco más de un año desde las últimas Elecciones Europeas en las que irrumpió con fuerza Podemos, y desde entonces nada es igual. Durante las siguientes semanas fueron cientos el número de solicitudes de municipios y pueblos de todo el país para poder formar un círculo; miles de personas que querían sumarse para colaborar y para aportar sus ideas y todo eso, frente a un país sorprendido y que no terminaba de comprender qué estaba pasado. Una marea ciudadana que, más tarde, se tradujo en la Asamblea de Vistalegre, en la que tuvo lugar la construcción de una organización política en la que participan más de 100.000 personas de todos los puntos geográficos del país. Un hecho, en definitiva, sin precedentes en la historia de España. Después llegó el 31 de Enero, despertándonos con más de 300.000 personas entrando en la madrileña Puerta del Sol, la que había sido el símbolo del 15M. Se daban cita en la Marcha del Cambio y ese día, nuestros adversarios se dieron cuenta de lo que hacía y hace poderoso a Podemos. La Marcha del 31 de Enero no fue una manifestación de protesta, todo lo contrario, fue una expresión de ilusión. Las Elecciones Europeas, Vistalegre y la Marcha del Cambio, tres hitos que descubren a nuestros adversarios por dónde atacar: la ilusión.

La ilusión es imparable cuando se convierte en eje de construcción política. La ilusión como el elemento clave que permite construir a velocidad de crucero un movimiento popular y ciudadano, y por lo tanto se pone en el centro de su objetivo. Nuestro adversarios se pusieron a la tarea de intentar desmoralizarnos, de tumbar nuestros estados de ánimo, de hacernos dudar si podemos ganar. Y para eso decidieron construir una realidad falsa a través de las encuestas. Las encuestas como arma para condicionar nuestros estados de ánimo, las encuestas para quitarnos la ilusión.

En el encuentro electoral les disputamos la democracia a los de siempre, entendida ésta como la capacidad de la gente para gobernar sus vidas. Disputamos también la soberanía, como la posibilidad del pueblo de tomar las decisiones que le permiten vivir bien. Y disputamos también los derechos, como la garantía de que nadie se queda fuera, de que no haya pobres en nuestro país. Empieza una campaña donde volvemos a empuñar el no nos representan. Donde tenemos que llegar a un acuerdo para impulsar cinco grandes ejes que pongan en pie un nuevo país. Nos damos a la tarea del proceso de modernización del país, a la modernización de un sistema político diseñado en los años 70. Y cuando decimos que no nos representan, es porque sabemos que un acuerdo como ese, solo lo podemos cerrar con los ciudadanos. Para un acuerdo así es imprescindible la reforma de la Constitución, una reforma impulsada por los ciudadanos y no solamente por los partidos políticos. Porque las reformas solo de los partidos políticos ya sabemos como acaban, con agostidad, modificando un art. 135 para el beneficio de los bancos.

Nuestro acuerdo tiene que ser con la gente, porque con la Gran Coalición -a la que Rajoy ya ha invitado a C's- no vamos a poder ponernos de acuerdo en las cosas fundamentales sobre los derechos sociales y privilegios de las élites de este país. No nos vamos a poner de acuerdo en que hay que defender a los pobres de nuestro país. Y los pobres de un país como España que está entre las primeras quince economías del mundo, no son los que se mueren de hambre únicamente. Los pobres de nuestro país también son los jóvenes que han terminado una carrera y pasan los años enviando currículum sin ninguna suerte, los que se tienen que marchar y alejar de sus familias para trabajar en otros países en condiciones precarias, las personas que desahucian, los trabajadores con edad avanzada que son despedidos sin posibilidad de volver a encontrar un empleo en el tiempo que les queda para jubilarse, y un largo etcétera de casos. Son millones los pobres de nuestro país, y son pobres por diferentes motivos.

Para ganar es imprescindible contar en esta campaña electoral con el jugador número 12: los Carteros y las Carteras del Cambio. Necesitamos llevar el mensaje de Cambio hasta el último rincón, a los lugares a los que los portavoces que salen en la televisión no llegan. Los Carteros del Cambio para que la gente se convierta en agentes del Cambio en primera persona, porque eso es lo que siempre ha diferenciado a Podemos, porque eso es Podemos. Es necesario generar una movilización popular trasladando la necesidad del cambio a través de una idea sencilla, llevando a cabo una intervención política directa en el entorno más inmediato, esto es, amigos, compañeros y familiares. Los Carteros del Cambio entregarán en mano de una carta de Pablo Iglesias, porque frente a los candidatos que van a defender los intereses de los banqueros y del IBEX35, es el candidato de la gente corriente. La carta irá dirigida a cualquier ciudadano, que a su vez irá acompañada de otra más personal, donde los Carteros podrán explicar sus razones personales para el Cambio. Con estas cartas se trata de sacar a la luz los miles de relatos de drama que asolan nuestro país, de poner en el centro cuales son los grandes problemas contados en primera persona. Porque son las verdaderas razones por las que tenemos que ganar el día 20 de Diciembre.

Hace poco me recomendaban una canción que decía que no podemos perder esta oportunidad por miedo, porque en la vida las cosas más importantes se pierden solo por miedo. El motor del miedo solo nos puede llevar para atrás, y solo nos daremos cuenta después cuando sea tarde, y estaremos condenando a muchas generaciones a no tener futuro. Frente al miedo, miles de Carteros que hagan llegar el mensaje de que esta es la oportunidad, y que no hay más, que es en estas elecciones, que la única posibilidad de ganar es con Podemos, y que el cambio solo lo puede traer la gente. Quien lo hubiese dicho hace unos años, podemos ganar las próximas elecciones generales y acabar con la indecencia social.

Tenemos un poco menos de cincuenta días para volver a situar la ilusión como eje de la construcción de un nuevo país.

Ver acto de presentación de los Carteros del Cambio en Getafe (02-11-2015)