Los dictadores árabes, preocupados por las intervenciones extranjeras.
-¿Acaso vamos nosotros a asesinar a los civiles del vecino? ¡¡No!!
»¡Primero siempre los de casa!
»Y que conste que no somos racistas.
Los dictadores árabes, preocupados por las intervenciones extranjeras.
-¿Acaso vamos nosotros a asesinar a los civiles del vecino? ¡¡No!!
»¡Primero siempre los de casa!
»Y que conste que no somos racistas.