La frase habitualmente atribuida a Gandhi, "no hay caminos para la paz, la paz es el camino", que en realidad es de A.J. Muste, un también influyente pacifista del siglo XX, es más que nunca aplicable al conflicto vasco. Pero si la paz debe ser el camino, es decir, lo que debemos hacer y conseguir, ¿a qué nos referimos con el término paz? Porque la ausencia de violencia armada es lo que conocemos como paz negativa y es a lo que por el momento aspiramos a corto plazo en Euskadi y en España, ¿o quizá el objetivo vaya más allá y queramos una paz con más componentes en los que no exista violencia? Porque tampoco hay paz si hay violencia física o psicológica; si hay explotación económica, represión política, alienación cultural; o violencia contra la naturaleza, los bienes materiales o las personas; o si hay símbolos, lenguajes e ideologías que legitiman la violencia. Pero tanta complejidad no nos debe desaminar en el empeño de caminar hacia la paz y además hacerlo con paz. Quizá haya que ir aceptando pequeños avances tal y como vayan surgiendo para llegar a otros que vendrán posteriormente.

Con el comunicado de hoy, ETA establece un alto el fuego, con algunos adjetivos que lo hacen más contundente que otros anteriores, ya que lo califican de permanente, general y verificable. Con este comunicado y con uno próximo que afirme un alto el fuego definitivo habremos dado un gran paso hacia la paz, pero aun quedará mucho para que esta paz sea algo más que la no existencia de violencia armada. Y para ello, para construir una paz más verdadera en Euskadi y en España debemos ponernos manos a la obra todos, gobiernos, partidos políticos y sociedad civil, y colaborar en la medida de nuestras posibilidades en la creación de un clima favorable para conseguir la paz, ahora, durante muchos años más y por siempre. Respecto a lo inmediato, esperemos que la cercanía de las próximas elecciones autonómicas y municipales no influya para que los partidos políticos de cualquier signo no hagan todo lo posible por hacer que ésta sea la definitiva. Aunque con cautela... sigamos caminando.