Ha dicho Rajoy que ‘esto es un follón’. Creo que es la primera vez que dice algo congruente y verdadero.

Es un follón de difícil retroceso lo de Catalunya, unos clamando por la unidad, otros por la secesión, otros, empresarios y políticos españoles, por las consecuencias económicas para todas las partes, y otros, los obispos catalanes, defendiendo la independencia si es por vías democráticas y pacíficas. ¡Toma y yo! ¿Ha leído usted la Constitución, obispo Taltavull? Lo que ocurre es que se apuntan ustedes, tan sibilinos, sinuosos, falsos, hipócritas, grimosos y de dudosa espiritualidad, se apuntan, digo, a un bombardeo, entrando indebidamente en política y en contradicción con la totalidad de la Conferencia Episcopal española. Pero sí, Catalunya es un follón.

Es un follón lo del rescate, que si sí que si no, que ya veremos, que aún no, pero el caso es que de los cien mil millones que nos habían prometido para los bancos todavía no ha llegado ni un euro, y, claro, esas Casas de Misericordia que son los bancos se niegan a hacer patria, la patria del crédito.

Follón va a ser lo del País Vasco desde el próximo domingo con los nacionalistas e independentistas de derecha e izquierda aterrizando masivamente en las urnas y Parlamento. Veremos hasta dónde llega el pulso a la democracia y quién lo gana. Pero el follón es presumible.

También es un follón que la monarquía hace aguas, y cualquier ministrucho se le sube a las barbas.

¿Y qué me dicen del follón que supone que abrumadoramente y según todos los análisis y previsiones más fiables el 80% o más de los ciudadanos desean unos arreglitos tan lógicos como listas abiertas (84%), tiempo máximo de ocho años para todo cargo público (84%), reforma electoral proporcional entre el número de votos y número de escaños (80%), elecciones primarias abiertas y vinculantes para los candidatos de cada partido con participación de militantes y simpatizantes (82%), que se retome la cultura de negociación y pacto (79%), y a pesar del clamor los políticos no hacen caso?

Cabronada, más que follón, es la angustia a la que se somete a los pensionistas con la actualización o no de su pensión, más bien no, si quienes solo cobran 400 euros de prestación la seguirán recibiendo dentro de cuatro meses, follón es que nadie confíe en la justicia, que las Fuerzas de Seguridad atemoricen a los ciudadanos y los golpeen impunemente, follón es el caos educativo por causa de ahorrar y no consensuar, follón es que el Parlamento sea un trapecio sin red, que la televisión haya perdido la credibilidad, que el paro aumente sin límite, que las diferencias sociales se acentúen, follón es el recibo de la luz, follón es el hambre, los niños mal alimentados sin demagogia, follón es lo que mienten, lo que engañan, follón es la juventud sin futuro, follón es la corrupción, los obscenos escándalos de indemnizaciones y pensiones multimillonarias, follón es su incapacidad para resolver conflictos, la desesperanza de todo un pueblo. Follón es la babeante conciencia de los gobernantes. Todo esto es un follón por su culpa, señor Rajoy.

¿Algún follón más?

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Gota de MÁXIMA PESADUMBRE: ¿De verdad que no se nos hiela el alma al leer que ‘los servicios sociales ya atienden a más de ocho millones de personas que tienen que pedir ayuda para pagar los servicios más básicos, como alimentos, luz, agua...’, y que ‘el presupuesto lo han bajado un 65% en dos años’? ¿De qué pasta estamos hechos, es posible que no seamos capaces de rebelarnos y alzarnos contra esta ignominia y villanía de los gobernantes y exigirles que acaben con este drama nacional?, ¿es posible que la tristeza sea la impronta de nuestras vidas?, ¿o es la indiferencia?

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Gota PREVISIBLE: ¿No decían que todo el dinero invertido en cajas y bancos se recuperaría y por tanto no nos costaría nada? Bueno, pues el FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) ya anuncia que no se recuperará todo. ¿Por qué mantener esas cajas, qué ocultos intereses existen? Engañan y, una vez más, no pasa nada.