Balagán

Margallo y Gaza

El ministro de Exteriores José Manuel García-Margallo ha visitado Palestina e Israel en los dos últimos días. Durante su visita a Israel ha impulsado las aspiraciones de varias empresas españolas que optan a realizar obras gigantescas, como la construcción de una vía férrea entre Tel Aviv, en el Mediterráneo, y Eilat, en el mar Rojo, o el proyecto de un metro en Tel Aviv.

Ayer se reunió durante más de una hora con el primer ministro Binyamín Netanyahu y al acabar el encuentro manifestó que España no abrirá una oficina consular honoraria en la franja de Gaza, en contra de lo que Madríd anunció hace apenas unos días.

García-Margallo ha rectificado una decisión que ha calificado de "precipitada". Probablemente Netanyahu le pidió que se congelera la decisión, pero es muy posible que la Autoridad Palestina también se lo haya pedido.

Funcionarios del ministerio de Exteriores de España consideran que una oficina consular en Gaza sería de gran ayuda para el Consulado General en Jerusalén, puesto que en Gaza existe una comunidad de ciudadanos españoles que tienen muchas dificultades para realizar gestiones en el Consulado de Jerusalén debido al bloqueo israelí. Es decir que el nuevo consulado habría servido a ciudadanos españoles y les habría facilitado la vida, ya de por sí muy complicada.

No obstante, García-Margallo ha optado por ceder a las presiones de los dos lados, en caso contrario habría tenido que replantear la inexistencia de relaciones con Hamas, que es quien gobierna en Gaza, un asunto tabú en Occidente.

Muy distinta ha sido la actitud del primer ministro turco Erdogan, quien también ayer por la mañana confirmó que en mayo visitará la franja de Gaza, un viaje que disgusta a Israel y por lo tanto a Estados Unidos. Los israelíes han pedido a Washington que disuada a Erdogan de este viaje, pero el líder turco no ha cedido por el momento y viajará a Gaza justamente después del viaje que le llevará a Estados Unidos a mediados de mayo.

Las de Erdogan y García-Margallo son dos posiciones distintas con respecto a Gaza y con respecto al castigo colectivo que desde hace años sufren diariamente más de un millón y medio de personas.

Más Noticias