Respuesta al concejal Pedro Calvo
Con referencia a la información en la que el Ayuntamiento de Madrid asegura que investigó las denuncias que hicimos, queremos aclarar algunos aspectos: dice el concejal Pedro Calvo Poch que hubo una investigación. ¿Por qué no nos informaron de ella y de sus resultados? Él habla de 80 actas de inspección, pero superan las 500. Tampoco cuenta que ninguna de las "infracciones" prosperó, porque se basaban en una falsificación de datos realizada por el oficial de la Policía Municipal don Lorenzo Antolínez Remesal (núm. 52.8) o por sus agentes, siguiendo sus "instrucciones".

En cuanto a las denuncias de funcionarios por "amenazas": nos enteramos cuando las usaron "como prueba", cuando los técnicos D. Joaquín Rivera Visier y Daniel de la Hija y los agentes Lorenzo Antolínez y el Municipal núm. 7676, fueron a declarar ante el juez de instrucción nº 50, tras ser admitida a trámite la querella que presentamos contra ellos. También presentaron una denuncia en la Policía, firmada por el entonces concejal de Centro, Luis Asúa, por esos hechos de los que ni fue testigo ni podía serlo, por ser falsos.

El señor Calvo dice que Rivera Visier ya no está en la Junta de Centro. ¿Por qué no dice que se ha jubilado?
Sobre las dos sentencias condenatorias por "desobediencia leve" contra los firmantes, ¿por qué no aclaran que no son firmes y que están recurridas? Por último, el señor Calvo habla de "juicio contra los empleados municipales", cuando se trata de una querella criminal admitida a trámite por falsificación documental y prácticas mafiosas. Sólo nos queda añadir que el Ayuntamiento tampoco tiene conocimiento de la resolución firme de mayo del Tribunal Superior de Justicia de lo Contencioso Administrativo (primero de los tres procedimientos interpuestos contra el Consistorio), que condena al Ayuntamiento y nos entrega la licencia.
Dragoilo Jankovic Sekulvic y Rosa María Pinilla Olivar

Se busca candidato
Votante de mediana edad, mileurista con hipoteca, ciudadano corriente sin ayudas sociales, busca candidato electoral que le garantice cómo llegar a fin de mes sin ser moroso y con la despensa surtida. Por los cacareados cambios de ciclo económico y climático, el aspirante revelará cómo afrontar, para más inri, el aumento de las tarifas energéticas en 2008.

Asuntos de bulto como la unidad de España, la lucha común frente a todo tipo de terrorismo o la pluralidad y
coexistencia lingüística no serán en su programa motivo de confrontación. Se exige que sus promesas electorales sean justas y las cumpla sin trampa. Se busca que tenga don de gentes con nuestros allegados y dispares países iberoamericanos. Se precisa firme determinación diplomática para afrontar el tesón marroquí. Y dominio hablado y escrito de inglés y francés para hacerse oír en otras cumbres internacionales. Si vienen mal dadas y es necesario, se piensa en alguien sin prejuicios hacia un Gobierno de concertación nacional. Visto lo visto en esta última legislatura, ni se piden referencias.
Ulises Bellón
Madrid

Desesperado
Mariano Rajoy es un candidato desesperado. Casi todos recordamos que hace bien poco manifestaba dos cosas: una, su desacuerdo con la propuesta del PSOE de subir el salario mínimo interprofesional a 800 euros en cuatro años, porque eso podía afectar negativamente a la inflación; y, dos, que el crecimiento de la economía española el próximo año sería menor que el previsto por el Gobierno. Bueno, pues este fin de semana prometió elevar el mínimo exento del IRPF a 16.000 euros, apostillando que la menor recaudación que significa la medida se compensará con los recursos procedentes de una supuesta mayor actividad económica. Es decir, primero critica la subida de los salarios más bajos pero después propone la exención del IRPF para quienes los cobran; antes estaba convencido de que la economía española crecerá menos, y ahora dice que habrá mayor actividad económica. Este hombre nos vuelve locos a todos.

Mítines políticos
En la última década, los mítines políticos de campaña o precampaña electoral se han convertido en algo cada vez más ambiguo, más sin sabor, menos sincero y más falto de calor humano para la ciudadanía. Son actos muy bien organizados, muy medidos, donde no cabe una silla mal colocada. No faltan nunca caras guapas, cuerpos bonitos e imagen de juventud tras las tribunas de oradores. Los mítines se han convertido en el fiel reflejo de la política y del sistema social en el que estamos inmersos: cada vez más frío y deshumanizado.
Enrique González
Madrid

La unidad de Bélgica
Docenas de miles de personas se manifestaron este domingo en favor de la unidad de Bélgica, denunciando que "son sólo los políticos los interesados en echar leña al fuego", y 140.000 personas han firmado una petición para que los políticos respeten el país y su unidad. Por desgracia, esto sólo ha ocurrido allí. En España no sólo no se ha dado aún esa reacción patriótica, sino que uno de los dos grandes partidos utiliza de modo muy partidista los símbolos comunes, contribuyendo así a agravar el problema, mientras que el otro gran partido apenas está empezando a dejar de criticar esa conducta y asumir en positivo ese tema central de nuestra convivencia.
Felipe Seara Navarro
Zaragoza

Contra la especulación
Ante el desfase de precios que se produce actualmente entre el campo y las tiendas, que el propio Ministerio de Agricultura ha constatado en el Observatorio de Precios, algunas asociaciones de agricultores denuncian "la nula implicación" de las administraciones. Recriminan a los gobernantes que "no les da la gana de buscar a los que se quedan con el botín, ya que quizás algunos agentes de la cadena comercial tienen demasiado dinero como para que se haga justicia". Y es que "hemos llegado a una situación vergonzosa en la que en el campo y en la granja se paga por debajo de costes y en la tienda los precios suben como la espuma y contribuyen a endeudar todavía más la economía familiar". ¿No les parece que es hora de que las administraciones actúen contra la especulación?
Domingo Martínez Madrid
Baños de Valdearados (Burgos)