Pese a sus denodados esfuerzos, JOSÉ ANTONIO GRIÑÁN no ha persuadido aún a Unicaja y Cajasol para que alumbren la gran caja andaluza por la que lleva años suspirando. Sus máximos responsables le han prometido muchas veces estudiarlo, pero siguen sin dar un paso adelante. BRAULIO MEDEL no quiere que nada altere la paz de Unicaja, que debería haber sido una de las grandes protagonistas de la reestructuración del sector y al final se ha quedado como estaba. Y a ANTONIO PULIDO tampoco le entusiasma una operación que comprometería la continuidad de Cajasol según hoy la conocemos.

Inasequible al desaliento, el presidente de la Junta se ha embarcado en otra operación de incierto desenlace, la de promover una oferta andaluza para SOS, el segundo grupo alimentario español detrás de Ebro. Desde que se destaparon los turbios manejos de los hermanos SALAZAR, SOS libra una dura lucha por su supervivencia, que exige tapar el agujero dejado por los antiguos gestores. Para ello, ha pergeñado un plan que incluye la entrada de nuevos socios mediante una ampliación dineraria de capital por importe de 200 millones.

Uno de los interesados en sumar fuerzas con SOS es la portuguesa Sovena, que ya comercializa aceite en España bajo el nombre Hacendado, la marca blanca de Mercadona. La estadounidense Bunge y la francesa Saipol-Lesieur tampoco ven con malos ojos la posibilidad de meter la cabeza en el grupo español, aunque todavía están pensándoselo. Cualquiera de estas opciones es percibida como una amenaza desde Andalucía, primer productor mundial de aceite de oliva y que tiene en SOS –propietario de Koipe y Carbonell– a uno de sus grandes clientes.

Se explica así el deseo de Griñán de que desde su región emerja una alternativa frente a las multinacionales que revolotean alrededor de SOS, por más que se trate de un empeño difícil. Su candidato predilecto es Hojiblanca, que agrupa a 73 cooperativas oleícolas; pero necesita obtener financiación y Griñán está intentando convencer a las cajas andaluzas, que conocen lo que SOS puede dar de sí porque ya son accionistas.

Una duda muy reveladora
Unicaja, Cajasol, Cajasur y Caja Granada acumulan un 16,9% de SOS, tras la capitalización de los créditos concedidos al grupo que se aprobó en la junta del viernes dentro del plan de reflotamiento. Ninguna de las cuatro ha confirmado todavía si acudirá a la ampliación de capital, pese a que sobre el papel parece muy ventajosa. El precio fijado para esa operación es de 0,50 euros por acción, menos de una tercera parte de su valor bursátil. Los títulos de SOS cerraron ayer a 1,53 euros.