Que nadie diga que es más básica que el mecanismo de un botijo, que le encantan los focos, los posados y los lujos. Que a nadie se le ocurra pensar que improvisa, que es autoritaria, que le gusta ir de víctima cuando es verdugo. Sencillamente, es su modo de vida.
Que no haya personas deslenguadas que vayan diciendo por ahí que asegurar que COVID-19 viene de "Coronavirus Diciembre 2019" es una absoluta sandez. Que no haya quien considere una estupidez señalar a las tiendas regentadas por personas de origen chino como foco del contagio porque "todas usamos gomas del pelo made in China". Que no piense nadie que quien hace estas cosas sea, por ser generosos, pánfila. Sencillamente, es su modo de vida.
Que nadie considere que es una mentirosa quien acusa al Gobierno central de tener parado en aduanas material sanitario comprado por Madrid cuando aún tardaría casi un mes en llegar el primer avión con mucho menos material del prometido. Que nadie crea que es cínico culpar al Gobierno de la nación de que Madrid lidera las muertes de mayores en residencias cuando es competencia tuya y tu gobierno ha prohibido que los casos positivos en este centro se lleven al hospital. Sencillamente, es su modo de vida.
Que nadie acuse de tener más cara de espalda irse a un apartamento de lujo a precio de amiguete durante el confinamiento y manipular importes y conceptos de las adjudicaciones públicas asociadas al amiguete. Que nadie detecte hipocresía y desfachatez en defender las bondades para un niñ@ de comer pizza cuatro quesos y refresco de cola todos los días. Sencillamente, es su modo de vida.
Que nadie piense que se prime la economía sobre la salud cuando se desescala a mayor ritmo de lo aconsejado por los profesionales sanitarios, lo que da lugar a sonadas dimisiones de técnicas sanitarias de referencia. Que nadie vea ansias de favorecer el sector privado en externalizar pruebas diagnósticas a precio de oro o saltarse las ordenanzas de urbanismo para la construcción de un nuevo hospital tirando para ello de procedimiento de urgencia. Sencillamente, es su modo de vida.
Que nadie que se aventure a asegurar que Madrid no dispone de suficientes rastreadores por falta de previsión o que éste mismo déficit de anticipación ha llevado a una vuelta al cole precipitada, sin infraestructuras preparadas y sin la cantidad de profesores y profesoras de refuerzo prometid@s. Sencillamente, es su modo de vida.
Que nadie crea que hay caos en el gobierno madrileño porque desde la Consejería de Sanidad vayan por libre, la presidenta se entere por Whatsapp y el vicepresidente deje plantada a la prensa porque no sabe qué decir. Sencillamente, es su modo de vida, ese que le lleva a posar como una santa porque cree que lo es... y su modo de vida es el de muerte y enfermedad de miles de personas.