En un lugar apartado de la ría de Pontevedra que se llama Bueu, Javier Solana aprovecha la paz olímpica para tratar de convencer al iraní Said Yalili de que acepte limitaciones y controles en el uso de la tecnología nuclear. Míster PESC habla con Teherán por teléfono desde debajo de una parra y queda a la espera del documento de respuesta. Cuando recibe a la prensa, dice que le gustaría seguir haciendo lo que hace, pero más despacio. Sobre Radovan Karadzic, el carnicero de Sarajevo, al que conoció en 1995 en Pale, afirma: "Nunca hubo un acuerdo (de impunidad), que yo sepa".
Estás leyendo: Solana, pendiente de los malos
Comentarios
<% if(canWriteComments) { %> <% } %>Comentarios:
<% if(_.allKeys(comments).length > 0) { %> <% _.each(comments, function(comment) { %>-
<% if(comment.user.image) { %>
<% } else { %>
<%= comment.user.firstLetter %>
<% } %>
<%= comment.user.username %>
<%= comment.published %>
<%= comment.dateTime %>
<%= comment.text %>
Responder
<% if(_.allKeys(comment.children.models).length > 0) { %>
<% }); %>
<% } else { %>
- No hay comentarios para esta noticia.
<% } %>
Mostrar más comentarios<% _.each(comment.children.models, function(children) { %> <% children = children.toJSON() %>-
<% if(children.user.image) { %>
<% } else { %>
<%= children.user.firstLetter %>
<% } %>
<% if(children.parent.id != comment.id) { %>
en respuesta a <%= children.parent.username %>
<% } %>
<%= children.user.username %>
<%= children.published %>
<%= children.dateTime %>
<%= children.text %>
Responder
<% }); %>
<% } %> <% if(canWriteComments) { %> <% } %>