Fuego amigo

Más falso que un premio Planeta

¿No notáis algo raro en los premios Planeta de este año? Lo ganan dos escritores, prácticamente desconocidos para el gran público, cuyas novelas son "las menos malas" de cuantas se presentaron, según palabras de Joan Marsé, ex miembro del jurado a estas horas. La editorial debe de estar encantada con su incontinencia verbal. No hay argumento de venta mejor que ese de cómpreme usted esta mierda, señorito.

Tengo un amigo que ha hecho famosa la frase de es más falso que un premio Planeta, en referencia a que siempre se consideró un premio por encargo, lejos ya de su primera ambición de encontrar y premiar autores noveles. ¿Qué ha ocurrido este año? ¿Es que todos los escritores famosos han recibido ya su Planeta, o es que de pronto les ha atacado una especie de gripe aviar en forma de vergüenza torera?
Aunque bien mirado, pensemos un momento (venga, niños, a pensar, que no duele): quizá los premios de este año, una vez recuperado el espíritu original, merezcan de verdad la pena. Al menos tienen la pinta de que no ha habido tongo, ni encargo, ni compadreo, ni venta de imagen. Son los menos malos de más de cuatrocientos autores anónimos. Y a lo mejor, sólo por eso, hasta son buenos. Con permiso de Marsé.

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