Cabeza de ratón

Pajarracos

Buitres de fondo sobrevuelan por encima de nuestras cabezas, la carroña del ladrillo tiene un olor irresistible, huele a dinero pero el dinero no tiene olor ni color, a veces ni existe. Sólo son cifras que se anotan en las entidades bancarias, cantidades imaginarias que circulan por los volátiles paraísos fiscales, los únicos paraísos posibles. El banco malo está saliendo peor de lo que se esperaba, en infame alianza con los fondos buitre, los banqueros malos urdieron una trampa para que cayeran clientes incautos tentados por viviendas a precios asequibles, despojos del gran expolio inmobiliario.

La marca España se ha transformado en marca blanca, tiramos los precios, gran liquidación final  por cese del negocio, los ladrillos se venden al peso, las pequeñas empresas y los negocios familiares quiebran y desaparecen, se asfixian sin los créditos de los bancos rescatados. Tenemos un banco malo (¿hay alguno bueno?), un banco malvado prolífico en artimañas, experto en engaños, bandada de pajarracos que lucha por las piltrafas que dejaron sobre el campo bancos que también eran malos, y de la suma de todos los males no puede salir nada bueno, ni por supuesto decente.

El Estrecho de Gibraltar está plagado de cadáveres subsaharianos, de las concertinas de Melilla cuelgan jirones de pieles oscuras. Estos descendientes de africanos esclavizados y colonizados no quieren ajustar cuentas pendientes, solo quieren volver a ser explotados por los "bwanas"  blancos y europeos. Mejor explotados que muertos, mejor ahogarse que morir de inanición. Ya no les necesitamos, vuelvan por donde han venido, somos demasiados para repartir lo poco que nos han dejado los que se lo llevan todo. La insolidaridad cunde, estamos sordos, ensordecidos por los ecos del derrumbe generalizado, ciegos dentro del túnel, miramos hacia dentro, ensimismados en nuestras miserias cotidianas, hipotecados, desempleados y hambrientos. En España se puede comer aunque sea rebuscando entre las basuras o acudiendo a los comedores sociales o a los bancos de alimentos (los bancos buenos) los inmigrantes africanos no tienen esos chollos. En los centros de internamiento reparten tres comidas al día y mantas para entrar en calor, en las cárceles también, pero nuestras cárceles están saturadas y tienen que hacer sitio para los delincuentes de guante blanco y corazón negro que van desfilando por sus instalaciones . Se cumplen 5 años del destape de la trama Gürtel: 187 imputados, solo uno en prisión, 74 implicados eran cargos del partido gobernante, 61 empresarios participaron en la fiesta. Don Vito, Luis el Cabrón, el Bigotes, el Rata, el Albondiguilla son algunos de los alias de la banda. A la espera del juicio siguen apareciendo nuevas corruptelas, pero ya nadie se rasga las vestiduras que no está el presupuesto para renovar los fondos de armario. Francisco Camps "El curita" se hizo con un espléndido vestuario gracias a sus "amiguitos del alma", desalmados, corruptos y corruptores que le vistieron como un príncipe de las tinieblas.

Si algún día logramos deshacernos de toda esa morralla y recuperar parte de los que nos han robado, habrá sitio para todos menos para ellos. Unos estarán en Soto del Real y otros habrán pedido asilo político en las Islas Caimán.  Bienvenidos hermanos del otro lado del Estrecho, queremos un mundo sin razas, ni fronteras, una república de personas honradas. Dicen que han visto al fantasma de Diógenes con una linterna, buscando a un hombre (mujer) por los pasillos del Congreso. En ello sigue.

Más Noticias