17/06/2008

Noche de sirenas y luces azules
La del domingo fue la noche más complicada en lo que llevamos de Eurocopa en lo que se refiere a la seguridad. En las calles de Viena coincidieron los hinchas turcos eufóricos que residen en la capital de Austria, la afición alemana que ya había llegado para presenciar el partidazo del día siguiente y los propios seguidores locales que mostraron con orgullo sus colores horas antes del duelo más importante de su historia reciente. Alto riesgo por la evidente rivalidad entre unos y otros. La policía tuvo que multiplicar sus esfuerzos y ni las orillas del Danubio sugerían calma: constantemente aparecían coches de las fuerzas de seguridad circulando a toda velocidad y con las sirenas rompiendo el silencio de la noche vienesa. Pero habrá más días difíciles: el viernes juegan en el Ernst Happel Croacia y Turquía, dos de los equipos con hinchadas más apasionadas.

El momento de Rustu
Su carrera internacional parecía terminada, pero la expulsión de Volkan Demirel le dará a Rustu Recber la oportunidad de jugar otros cuartos de final de una Eurocopa. El ex guardameta del Barça cuajó grandes actuaciones en la edición del 2000 y sobre todo en el Mundial 2002, en el que Turquía acabó tercera. Esa fama internacional lo llevó al Barça, donde estuvo desafortunadísimo. Tras volver al Fenerbahçe, la eclosión de Demirel lo condenó a la suplencia, por lo que tuvo que cruzar la ciudad y fichar por el Besiktas, con el que ha jugado con regularidad en la presente temporada. Ahora tiene el difícil reto de sustituir a un arquero que ha estado muy inspirado en el torneo –fue clave ante Suiza-, pero experiencia no le falta. ¿Le veremos a sus 35 años con aquellas famosas pintadas de guerra en la cara que se hicieron famosas?

Ribéry, tú debes ser Zidane
Alarde de sinceridad de Franck Ribéry en rueda de prensa. El magnífico futbolista del Bayern afirmó que Francia debe jugar con más atrevimiento y que hasta ahora sólo piensa en defender. ¿Es un consejo, una opinión, una crítica? Luego admitió que el equipo echa de menos a Zinedine Zidane. Resulta curioso que lo diga él, que precisamente es el jugador que debería asumir el rol del ex Balón de Oro. Aún está muy lejos de alcanzar el nivel de Zizou, pero Domenech lo ha ubicado como media punta en varias ocasiones, justo en la misma posición en la que jugaba el marsellés con les bleus. Habrá que interpretarlo como una maniobra para descargarse presión, un aviso a navegantes: no esperéis que me parezca al mito, soy distinto y peor. Lo tendremos en cuenta.

Suiza tenía fútbol para más

Al menos se fue con sabor de victoria y ante un equipo potente como Portugal. La anfitriona que partía con más opciones se despidió confirmando lo que ya sospechábamos: el fútbol ha sido injusto con ella, que tenía argumentos para clasificarse para cuartos de final. El partido de Basilea estuvo lleno de detalles emotivos: cariñosa despedida a Kobi Kuhn y sentido abrazo de Hakan Yakin con Alex Frei, el capitán al que una lesión derrumbo y con el que empezó a hundirse la nave helvética.

Detalles del campo
Huntelaar no es un chollo: Aunque Van Basten saque a algunos suplentes, los menos habituales querrán ganarse un puesto. ¿A quién le apetece enfrentarse a un Huntelaar hambriento?
Le piden a Cassano: Donadoni puso ante Rumanía casi todo lo que le habían pedido. Pero faltó Cassano. Como el resultado tampoco acompañó, la crítica ahora suplica que juegue Antonio.
Vieira, ¿el ímpetu que faltaba?: Toulalan ha naufragado en el centro del campo, quizá porque juega demasiado pausado. Francia espera despertar con la vehemencia de Vieira.
¿Y Benzema?: No jugó ni un minuto ante Holanda y se le echó de menos. Henry marcó un gol, pero estuvo muy solo hasta que Domenech hizo los cambios. ¿Veremos hoy a Karim?
El empate no sirve: Hasta ahora, Rumanía ha salido a esperar y contragolpear. Pero quizá hoy tenga que asumir más riesgos, porque sólo la victoria le garantiza la clasificación.