Mi televisión y otros animales

Golpes de ¿suerte?

Tengo un problema. Bueno, tengo varios, pero uno en lo que concierne exclusivamente a este post. Verán: por algún motivo que yo mismo no acabo de entender, decidí ver la nueva serie juvenil de Telecinco: Un golpe de suerte. Hasta tres capítulos me he visto como quien no quiere la cosa, que es, de hecho, exactamente lo que pasaba.

A pesar de los flojos resultados de audiencia hasta el momento, sé que acabará despegando: hay carne fresca y juvenil en cantidades ingentes, hay conflicto, hay sexo, hay tensión sexual no resuelta, hay buenos y malos... y también hay una fuerte carga erótica. Incluso los guionistas han tenido la inteligencia de poner a unos personajes adultos con más de dos dimensiones de los que poder tirar si hay que aumentar el target de la serie. Es más, estoy seguro de que el personaje de Aníbal Soto acabará siendo un espía, para poder estirar la serie hacia otros cauces. Si no, no encuentro explicación a por qué parece que va disfrazado todo el rato:

 Anibal Soto como Luis

El caso es que aquí Aníbal Soto me recuerda a alguien...

Si tenemos claro de qué formato estamos hablando, no hay nada, o casi nada criticable. Los guiones son tópicos, pero correctos, al igual que los actores. La producción no es un desmadre, pero se ha hecho un fuerte despliegue de exteriores para poder poner un elevado número de jóvenes en traje de baño. Es curioso como todos los veranos las teles nos enganchan con gente en bikini y bañador. Sobre todo porque no hace falta recurrir al voyeurismo catódico para tales visiones en estas fechas.

 Un golpe de suerte

Una serie funciona cuando tiene buenos argumentos

Todo es tan estándar que ese es el único riesgo que le veo a la serie: que no da en las tripas. Ni para bien, ni para mal. No es una obra maestra, claro, pero tampoco tiene, de momento, ni polémica en los temas ni cosas tan cutres que puedan enganchar a los espectadores más trash. Y les recuerdo que soy espectador habitual de El juego de tu vida.

El problema al que me refería al principio es que, en último término, no soy público objetivo, así que comento "de oído".  Nunca seguí The OC, apenas me asomé a un par de capítulos de Gossip Girl y sólo veía Al salir de clase cuando algún colega hacía figuración en la serie. Vamos, que me faltan los referentes.

Menos mal que estoy seguro de que la bondad y sapiencia de mis amables comentaristas suplirá mis carencias.

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