Por fin ha tenido lugar uno de los estrenos más esperados. Nada que ver con mi vida sexual. A las antenas americanas ha llegado por fin Flash Forward, la serie llamada a ser la heredera de Perdidos. No por nada, sino porque así la llaman los de la ABC, que no saben cómo rellenar el hueco que dejará la próxima primavera el final de Lost.

El peso de la responsabilidad se nota en los primeros minutos. Es difícil no asociar la escena con la que arranca la serie a cierto accidente de avión en una isla del pacífico. Hay algo en el tono y el ritmo... no sabría explicarles. Aunque tampoco sabría explicarles casi nada de Perdidos ni de Flash Forward, así que es lógico.

_{"¡Que no soy Jin, copón! Suéltame, que le meto"}

Sin embargo, a medida que avanza el capítulo, la cosa se va calentando y los elementos propios que se mezclan dan un nuevo sabor, más propio. El punto de partida es que durante dos minutos y diecisiete segundos, todos los habitantes de la Tierra sufren un desmayo. Pero no uno normal de cuando vas a un concierto de los New Kids on the Block, no: uno en el que todo el mundo se ve a sí mismo seis meses después.

El juego de los flash forwards (vistazos en el futuro) no es el mismo que Perdidos. Podría decir que se parece más al papel que cumplen en Heroes, pero les recuerdo que estoy enfadado con esa serie. Dicho de otra manera, como predice el principio físico de indeterminación, percibir un fenómeno provoca cambios en el mismo, por lo que esos flashes pueden permitir a los protagonistas cambiar el futuro. ¿O no? ¿O quizá les lleven de la mano por el camino de la profecía autocumplida? Me ponen un montón las series de ciencia-ficción con posibilidades filosóficas, lo reconozco.

El primer capítulo no tiene más que un esbozo de personajes que pueden ser interesantísimos o un tostón, eso dependerá de los guionistas. Lo acertado es sembrar el conflicto emocional y en la alteración de las relaciones interpersonales que ha producido el desmayo colectivo. Quizá en esto radica el mayor paralelismo con Perdidos, en que la psicología de los personajes es importante.

La mayor diferencia, ya que estamos, está en la asunción desde el primer momento del género ciencia-ficción. Mucha gente está a la gresca con Lost porque vieron el principio de la primera temporada y pensaron que todo iba a ser El señor de las moscas con niños talluditos. Flash Forward no da lugar a error desde el momento en que la firma David S. Goyer, guionista de la nueva saga cinematográfica de Batman, Dark City, los Blade y, sobre todo, la versión de Nick Furia protagonizada por David Hasselhoff. ¡Uf!

Además de personajes, el piloto presenta muchas preguntas y oscuros apuntes de líneas argumentales. Es lógico, no van a liarse a resolver cosas en una serie de misterio desde el minuto uno. Lo básico es que el espectador quiera conocer las respuestas a esas cuestiones. Lo mismito que  cuando pillas Saber y ganar haciendo un zapping.

Y ya saben que en esta bitácora somos muy de Jordi Hurtado. Dónde quiera que esté.