Mi televisión y otros animales

Matar gente es mejor que el sexo

Hace tiempo que quiero hacer un experimento. Bueno, dos. El que puedo confesar consiste en contar cuánta gente muere a lo largo de una semana en la ficción americana. Sospecho que Jack Bauer y CSI acaban con las teorías agoreras de Malthus en media temporada.

Si me permiten un mini-spoiler de la segunda temporada de 24, en el primer capítulo Jack mata a un preso a quemarropa para poder robarle algo. Concretamente su cabeza. Y no pasa nada, nadie se escandaliza, como mucho se nos escapa un "hala, qué burro". Sin embargo todavía espero ver un pezón en la serie. Siete temporadas que llevo esperando. Empiezo a plantearme que acabo antes comprando una revista.

La conclusión es: matar, bien. Encargar niños nuevos, mal. Y con preservativo ya ni hablamos.

Me acuerdo de todo esto ahora porque en los Estados Unidos están a broncas por culpa de Gossip Girl porque a los guionistas se les ha ocurrido la locura de que algunos de sus personajes se monten un trío. Al principio pensé que era un trío de cuerdas y que la población se escandalizaba por tamaño despropósito cultural. Pero no, es un trío de los que ustedes están pensando.

 

Escandalazo, oigan

El problema, para la organización protestante (de protestar) es que la serie está "dirigida expresamente hacia un público de adolescente muy impresionable". Y aquí viene el drama: los productores responden muy serios diciendo que su público tiene una media de edad de ¡27 años! ¿No es eso lo verdaderamente preocupante?

En serio, no entiendo el problema de los padres con ese capítulo de Gossip Girl. Si no quieren que sus hijos adolescentes lo vean, lo tienen muy fácil: bastará con cambiar de canal y ponerles el mucho más edificante asesinato que estará resolviendo Horatio Caine en otro canal.

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