Trabajar cansa

Almacén nuclear: me lo pido

"Si Guadalajara ha sido muy solidaria en lo nuclear, El Ejido lo es en viveros y Benidorm en turismo. ¿Qué hay de malo?" -Juan Pedro Sánchez, alcalde de Yebra- 

                 

No entiendo las reticencias para la instalación de un almacén de residuos nucleares en algún municipio. Si, como asegura el ministerio de Industria, la instalación será totalmente segura y no dará problema alguno a su entorno, ¿dónde está el inconveniente? Y encima, el que acepte quedarse la basura radioactiva se llevará setecientos millones en inversión y un puñado de puestos de trabajo. 

Sin embargo, ya ven: en los pocos pueblos que se lo están pensando, hay división política y rechazo vecinal. Y en el caso de Yebra, la secretaria general del Partido Pronuclear ha amenazado con sanciones al alcalde por presentar la candidatura. ¿Es que el PP flaquea en su defensa de la energía nuclear? ¿O hay algo que no nos han contado? 

Lo del almacén nuclear es como aquello que se decía del trabajo, que si fuese algo tan bueno como aseguran, se lo quedarían los ricos. Pues lo mismo el almacén: si fuese el chollo que dice el gobierno, completamente seguro y creador de riqueza y empleo, se lo disputarían las capitales y se lo acabaría quedando Madrid. A falta de Juegos Olímpicos, un pozo lleno de mondas nucleares. Tal vez por eso el gobierno sacó la convocatoria la víspera de nochebuena, para que sólo se enterasen unos pocos y no hubiese peleas por llevarse el regalo. 

Además, no es cierto que un almacén de residuos espante inversiones y turismo. Si como dicen habrá cientos de transportes peligrosos procedentes de las centrales y de Francia –donde en su día colocamos cien toneladas que hay que recuperar-, los restaurantes se forrarán con menús para camioneros. Y los ecologistas que organizan manifestaciones contra esos transportes, algo de gasto harán en el pueblo, ¿no?

Más Noticias