¡Qué tarde, la de aquel martes! El perdedor de las dos últimas Elecciones Generales cogió su fusil dialéctico y dejó a la vicepresidenta económica del Gobierno como un colador en el debate de los Presupuestos. "Podría haberla machacado", le escucharon perdonar la vida a su rival al héroe de la Carrera de San Jerónimo, que al día siguiente recibiría un baño de ego en el único periódico que no lo ha abandonado. "Rajoy noquea a Salgado" titulaba a todo gas La Razón. Eso, en primera; en el interior, siete páginas -¡siete!- glosaban la hazaña mariana, esta vez bajo el encabezado "Rajoy apabulla a Salgado en su debut parlamentario".

El cantar de gesta continuaba en un editorial escrito en posición de firmes. Lean: "El vapuleo dialéctico al que Mariano Rajoy sometió a la vicepresidenta económica del Gobierno en el debate sobre los Presupuestos es de los que dejan huella en la historia del parlamentarismo". ¿No se les pone la piel de gallina? Pues miren a ver si, por lo menos, les corre un escalofrío ante las palabras que dedicó a su ídolo el columnista José Antonio Vera: "La vicepresidenta económica hizo ayer lo que pudo en su estreno parlamentario, el problema es que Rajoy es demasiado toro para tan bisoña novillera. Lo que se demostró sobradamente. El gallego estuvo directo como en sus mejores tardes, mordaz como de costumbre, rápido como en los días buenos, y sobrado porque le sobró la mitad de su intervención para mostrar las carencias de Salgado". ¡Ooolé!

Gistau, jarro de agua fría

El cronista parlamentario de El Mundo David Gistau también se hizo eco de la faena del diestro de Pontevedra sin escatimar elogios, aunque no puedo evitar dejar caer un jarro de agua fría en medio de la fiesta gaviotil: "El aplauso atronador de la bancada parecía querer espantar el fantasma Gürtel y festejar que el partido se sintió algo más que un ente judicializado y autodestructivo". Dura poco la alegría en casa del tocado por la Gürtel.

En Cope, sin embargo, sí están haciendo durar la manifestación del sábado. Para Juan Manuel De Prada no existe otro asunto desde hace una semana. Les transcribo la penúltima del autor de Coños: "A Zapatero lo único que le preocupa es que el crimen del aborto se convierta en sacrosanto derecho a exterminar vidas inocentes porque nos da la real gana. Lo que anhela esta reforma es convertir a las mujeres que abortan en esclavas agradecidas al Gobierno que las absolvió de culpa". Continuará.