Dominio público

La catenaria de Ayuso y Almeida (investidura 2)

Ana Pardo de Vera

No es que la presidenta de la Comunidad de Madrid y el alcalde de la capital recibieran la propuesta del rey para un intento de investidura de Pedro Sánchez con alegría -no esperábamos tal cosa-; es que este martes estuvieron a sendos cubatas de quemar La Zarzuela, incluso de antes de que Felipe VI se pronunciara al respecto tras la consulta al presidente del Gobierno en funciones.

Las reacciones de Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez Almeida tras conocerse las averías ferroviarias que provocaron retrasos en el AVE y en los cercanías madrileños han sido la muestra perfecta de lo que espera a Sánchez y al PSOE, también a sus potenciales socios de investidura, en este mes aproximado de negociaciones para llegar al Congreso con un acuerdo que mantenga al líder socialista en La Moncloa una legislatura más.

"Madrid, otra vez sumido en el caos por culpa de Sánchez, que castiga a nuestra región sin inversiones esenciales. Los madrileños, rehenes de las averías y retrasos de Renfe", tuiteaba Ayuso por la mañana. Al mismo tiempo, Almeida se despachaba a gusto en los medios contra el independentismo satánico que se lleva todas las inversiones del Estado como pago al chantaje al que someten al Gobierno de coalición, o así (madrileñas y madrileños "castigados por las cesiones frente al independentismo", dijo literalmente). Por supuesto, la campaña más virulenta contra las negociaciones de Sánchez para ser (re)investido presidente empezó en Madrid -y no en la calle Génova- y antes de que el rey se pronunciara; va de suyo.

Nos esperan días, semanas incluso, con un clima político irrespirable, sobre todo por territorio madrileño, donde el nacionalismo español gana por goleada en su versión Madrid-Miami. Los pasajeros y pasajeras afectadas por las averías del ferrocarril madrileño, desde luego, merecen toda la consideración y solidaridad, ¿quién no ha sufrido (sic) algún percance de este tipo alguna vez en un tren, autobús o metro? Pero es un delirio mezclar las catenarias fallidas (o no) de los trenes con las inversiones en Catalunya, salvo que una presidenta autonómica o un alcalde consideren que los/as ciudadanos para los que gobiernan se lo creen todo, son unos desinformados o, literalmente, ignorantes de toda solemnidad.


Un apunte, pues, para todos ellos/as, antes de que se pronuncien o les pongan un cantón de limpieza delante de su casa: en casi 30 años, Madrid se ha llevado prácticamente la mitad del dinero público destinado al servicio ferroviario más usado por los españoles. Además, el plan actual de mejora de Cercanías de la Comunidad contempla una inversión de 6.500 millones de euros, 1.500 millones más que lo que prometió el Gobierno de Mariano Rajoy. Todos los datos son públicos, los tiene el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana; también la Comunidad de Madrid y los recogió muy bien este mismo martes Carlos Márquez en El periódico. Periodismo, que nos va a hacer mucha falta (como la paciencia).

Más Noticias