Otras miradas

La coreografía sexual

Laura Arcarons Martí

Cooperativa Mandràgores

La coreografía sexual
.- PEXELS

Si prestáis atención a las escenas de sexo de la película o serie de turno que estéis siguiendo, probablemente lo que encontraréis es que la mayoría son bastante similares, en cuanto a tipos de relación, prácticas, rituales y ritmos. Esta pobreza no deja de ser un reflejo del imaginario tan limitado que tenemos como sociedad y al mismo tiempo actúa como fábrica de relaciones frustradas. Porque, como en todo, no a todo el mundo nos gusta ni excita lo mismo: ni las mismas personas, ni las mismas partes del cuerpo, ni las mismas prácticas ni cuerpos. Parece una obviedad, pero hay momentos en que todo te lleva a pensar que la única persona que no folla como en las pelis eres tú.

Nos explicamos, por si alguien aún no se ha dado cuenta. En las relaciones sexuales reales no siempre hay orgasmos simultáneos, de hecho a veces no los hay o incluso no se expresan gritando. Mirad si es curioso que incluso hay hombres que sí gritan. Y, qué novedad, no todas las relaciones son heterosexuales, pero es que además, ni los gays siempre hacen sexo anal ni las lesbianas sólo besitos. En la curiosa diversidad de la vida real, existen relaciones heterosexuales que no giran en torno a la penetración y en el sexo también tienen lugar las palabras, las risas y los métodos de prevención. Hay mujeres que se masturban, hombres heterosexuales que les gusta ser penetrados y también existen placeres más allá de los genitales. Existen infinidad de tipos de cuerpos y rituales de seducción fuera de los tópicos heteronormativos.

¿Es mucho pedir enriquecer las sexualidades de aquellos personajes que nos hacen de referentes?

Directores, productoras y guionistas tiene un deber hacia la sociedad: mostrar unas sexualidades reales, diversas, creativas, empáticas y placenteras que nos representen a todas, que rompan estereotipos, tabúes, modelos únicos y protocolos y que nos permitan imaginar un mundo de posibilidades para disfrutar. Que la expectativa que generen con el sexo sea la de compartir un rato de diversión y no la de una única manera de hacerlo.

Más Noticias