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Yacimientos burgaleses de Atapuerca

Con ciencia viajera por PEPE CERVERA

Hay lugares bendecidos por la suerte, como la Sierra de Atapuerca (Burgos). Por culpa de los azares del tiempo y la inimaginable cantidad de animales que han vivido en el pasado, sólo unos pocos fósiles han llegado hasta nosotros. Pero en esta sierra hay no uno, sino decenas de yacimientos (al menos cuatro de ellos con fósiles humanos); y separados entre sí por millones de años.

En Atapuerca, estos tesoros se descubrieron porque un ferrocarril minero cortó la sierra en el lugar justo. Ni un metro más allá.

Hoy la visita recorre la trinchera de este tren y permite contemplar varios yacimientos. Entre ellos, la Sima de los Elefantes, donde aparecieron restos humanos de hace al menos 1,2 millones de años de antiguedad; la Sima de los Huesos (500.000 años); Galería, que ha dado herramientas líticas y fósiles, además de restos humanos de época neandertal; y Gran Dolina, que muestra más de un millón de años de estratos, y guarda restos humanos de 800.000 años.

En ningún lugar del mundo se puede viajar tanto en el tiempo en tan corta distancia. Atapuerca puede visitarse desde Ibeas de Juarros (kilómetro 12 de la N-120, Burgos-Logroño).

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