Por Christian González

Que los niños aprendan inglés u otros idiomas desde pequeños ya no se considera una novedad, sino algo básico. Algo así podría pasar en pocos años con el verdadero idioma del futuro: el lenguaje de la programación informática. En muchos países, la programación ya forma parte del currículo en la educación secundaria o incluso en primaria. Los expertos consideran que fomentar el pensamiento computacional desde edades tempranas fomenta la creatividad y ayuda a los alumnos en muchas otras asignaturas. La organización sin ánimo de lucro Code.org -impulsada por personalidades como Mark Zuckerberg (Facebook), Bill Gates (Microsoft) o Jack Dorsey (Twitter)- tiene precisamente ese objetivo: difundir la programación como parte de la educación básica de los jóvenes. 

Gracias a Scratch, un entorno de aprendizaje de lenguaje de programación diseñado en el Media Lab del MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts), los niños pueden comenzar a introducirse en el mundo de la programación a edades muy tempranas, mediante un sistema visual que les permite aprender mientras crean animaciones o juegos.

En este ámbito llega Dr. Scratch, una herramienta desarrollada por un grupo de investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid junto con docentes de la asociación Programamos, para ayudar a los niños a aprender a programar con Scratch. Este proyecto ha sido reconocido recientemente por Google con un premio RISE award, siendo el primer equipo español que lo recibe.

Jesús Moreno León, codirector de la asociación Programamos, responde a las preguntas de Eureka.

¿Qué es Dr. Scratch? ¿Cómo funciona?

Se trata de una plataforma que permite analizar proyectos programados en Scratch, que es un lenguaje de programación visual pensado para que los niños puedan aprender a programar.  Lo que hace Dr. Scratch es analizar los proyectos realizados por niños para darles información y ayudarles a mejorar como programadores. Por otro lado apoya a los profesores con una puntuación al trabajo de sus alumnos y con una serie de ideas para que ellos pueden dar consejos a sus alumnos.

¿Y qué es Programamos?

Una asociación sin ánimo de lucro que hemos montado un grupo de docentes que llevamos varios años utilizando la programación en nuestras clases, de diversos niveles desde educación infantil hasta la universidad. Y lo hacemos programando videojuegos y aplicaciones para móviles con los chavales. Pero no para que todos aprendan a programar y se conviertan en informáticos el día de mañana, sino que a través de la programación de videojuegos los tenemos totalmente motivados para aprender otras muchas cosas. Y lo utilizamos para enseñar matemáticas, idiomas, ciencias, artes... todas las disciplinas.

¿Quiénes conforman el proyecto Dr. Scratch?

Es un proyecto que hemos desarrollado desde la Universidad Rey Juan Carlos, donde yo estoy desarrollando mi tesis. Hemos formado un equipo, mi director de tesis Gregorio Robles -que es el director del proyecto Dr. Scratch- y yo, junto a un equipo de desarrolladores, técnicos y gente que colabora con la plataforma. Básicamente el equipo de la Universidad Rey Juan Carlos apoyado por el equipo de Programamos, que codirijo junto a José Ignacio Huertas.

¿Cómo surgió?

Por dos motivos. Por un lado nosotros, como informáticos, cuando aprendíamos otros lenguajes de programación hemos usado otros programas que te indican los errores y sabemos que son muy útiles para aprender. Y por otra parte, como docentes, cuando tenemos que corregir los proyectos de Scratch de nuestros alumnos era un trabajo muy importante.

¿Qué ha sido lo más complejo a la hora de crearlo?

Sin duda, la falta de recursos. Ahora mismo colaboran con nosotros algunas empresas, la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), el premio que hemos recibido de Google que nos va a dar financiación para un año y nos va a permitir seguir creciendo... los recursos son el mayor handicap, como siempre.

¿Realmente un niño puede aprender a programar? ¿Es una expectativa realista?

Sí que lo es. Con las nuevas herramientas que existen actualmente los niños, de forma visual, puedan aprender a programar sin tener que preocuparse por la sintaxis de los lenguajes de programación habituales. Desaparecen los errores de sintaxis porque sólo las piezas que encajan las puedes poner juntas de tal forma que ellos se concentran en los fundamentos, en los pilares básicos de la programación sin preocuparse por otras cosas. De esta forma niños muy pequeños pueden aprender a programar. De hecho hay robots y otro tipo de dispositivos programables que permiten que los niños puedan empezar a introducirse en este mundo desde los 3 o 4 años.

¿Por qué lo consideran tan útil? 

Nosotros tratamos de desarrollar el pensamiento computacional. Es un término que se viene utilizando desde hace unos años y que consiste en una habilidad que permite formular los problemas de forma que sea posible resolverlos aprovechando la potencia de los ordenadores. Y esa capacidad, que implica pensamiento crítico, pensamiento lógico, capacidad de abstracción y otras habilidades es una habilidad que va a ser fundamental en muy poco tiempo para todos los ciudadanos sin importar el campo en el que vayan a desarrollar su profesión.  Y ciertos conocimientos de programación y un desarrollo del pensamiento computacional va a ser fundamental prácticamente en todos los campos profesionales en muy poco tiempo. Y así lo están demostrando los estudios de prospectiva y de previsiones que hace la Comisión Europea, y en EEUU y prácticamente en todos los lados.

Nosotros creemos que es muy importante introducirlo desde edades tempranas en la educación porque puede ser muy importante en la formación de nuestros jóvenes.

¿Cree que veremos pronto una asignatura de programación en todos los colegios españoles?

En Europa ahora mismo hay 12 países que han introducido la programación en el currículo de primaria o secundaria. Algunos lo hacen como asignatura obligatoria, otros como optativa, otros como un elemento transversal... Hay diferentes enfoques. En España hay algunas iniciativas. Navarra ha sido la comunidad pionera en este sentido. En Navarra desde este curso 2014-15, en cuarto y quinto de primaria es obligatorio que los niños aprendan a programar. Lo hacen asociado al área de matemáticas. En Madrid, el año que viene va a haber una asignatura de programación en secundaria asociada al área de tecnología. En Catalunya hay una asignatura optativa en cuarto de ESO para programar aplicaciones móviles...

Desde Programamos creemos especialmente que en la educación primaria la programación no tiene que ser una asignatura específica. No tiene que ser un fin en sí mismo, sino una herramienta que permita mejorar el aprendizaje de otras muchas disciplinas. Y creemos que debería utilizarse como tal en todas las asignaturas, no como una asignatura propia. Igual que los idiomas: en un mundo global el idioma tiene que ser y aprenderse como una herramienta para otras áreas, y en un mundo digital la programación, lo mismo. Se trata de programar para poder aprender otras muchas cosas.

¿Cuál es vuestra experiencia enseñando a niños a programar?

Para nosotros ver el grado de motivación de los niños cuando están desarrollando un videojuego es una maravilla. Porque son los propios niños los que nos van pidiendo cada vez más. Quieren constantemente ir mejorando sus videojuegos. Y en el proceso de mejorar el videojuego están muy pendientes de mejorar otras cosas. Por ejemplo, te preguntan cómo pueden aplicar la gravedad para que parezcan más realistas los movimientos de los niños... Y en ese proceso están aprendiendo otras muchas cosas de todas las disciplinas.

Llamamos a los niños 'nativos digitales', pero ¿Saben realmente utilizar las nuevas tecnologías para cosas útiles?

No le puedes dar una herramienta a un niño sin más y pretender que vaya a sacarle el máximo partido. Nuestros niños son unos buenos usuarios de nuevas tecnologías pero no son buenos creadores con la tecnología. Y ese es el cambio de paradigma que queremos crear. No sólo es saber utilizar aplicaciones sino saber crearlas, personalizarlas o combinarlas. Pasar de usuarios a creadores.

¿Qué papel tienen que jugar los profesores?

Como en cualquier otro campo educativo, la formación de los profesores es fundamental. En la Universidad Rey Juan Carlos hacemos investigaciones para medir el impacto del aprendizaje de la programación y hemos visto que la formación del docente tiene un impacto muy importante en el aprendizaje de los chavales. Docentes que están bien formados consiguen unos resultados espectaculares mientras que otros que utilizan la programación sin estar bien formados no consiguen los objetivos marcados.

¿Educamos bien a los niños y jóvenes? ¿Qué tiene que cambiar?

Creo que hay muchos docentes que hacen proyectos espectaculares y un trabajo magnífico. De hecho, los docentes van por delante de la administración. Los programas del ministerio y de las comunidades autónomas van muy por detrás de lo que muchos profesores están haciendo sin recursos, sin formación, sin apoyo... y eso es lo que debe cambiar.

Estos años ha habido muchos recortes en formación de profesorado y sabemos que eso incide mucho en la formación que se da a los alumnos. Los recortes en formación del profesorado atacan totalmente a la calidad de la educación.

¿Que planes de futuro tienen?

Por un lado con Dr. Scratch tenemos muchas ideas para seguir mejorando la herramienta y sus funcionalidades. Ahora, como parte del premio de Google, nos vamos a ir a Boston y vamos a estar una semana en las oficinas de Google trabajando con el resto de premiados y con los ingenieros de Google para tratar de hacer más escalable y más funcional la solución.

Con respecto a Programamos, seguir con nuestro trabajo de promoción de la enseñanza de la programación. Trabajando con CCAA para formar a sus docentes y seguir con nuestros eventos de promoción y difusión para tratar de concienciar a familias y administraciones públicas y docentes de la importancia de este movimiento.