"Nuevo escándalo de la alcaldesa de Barcelona y su equipo de gobierno. Hace pocos días la Guardia Civil entró en un piso de la zona de Horta-Guinardo porque en ese piso figuraban 1.600 empadronados de origen magrebí, 1.600 empadronados en un solo piso!!!".

Nuevo escándalo de la alcaldesa de Barcelona y su equipo de gobierno. Hace pocos días la Guardia Civil entró en un piso de la zona de Horta-Guinardo porque en ese piso figuraban 1.600 empadronados de origen magrebí, 1.600 empadronados en un solo piso!!!

— Rufino Liebana Carmona (@RufinoLiebana) March 16, 2023

Lo que se desconoce es cómo puedo entrar la Guardia Civil en semejante piso. Con que estuviesen 'solo' una cuarta parte de los "1.600 empadronados", sería complicado entrar con tanta gente en cualquier piso medio. Este tuit, lanzado el 16 de marzo por un personaje hiperactivo en Twitter, lo completa al menos otro que es doble pero igual de falso:

"Al entrar en el piso la Guardia Civil se encontró con que sólo vivían cinco individuos, los 1.595 restantes vivían en Marruecos pero al estar empadronados en Barcelona cobraban todas las ayudas que da el ayuntamiento y además pueden votar por correo en las próximas..."

"...elecciones municipales. Este piso sólo es uno de los muchos más que seguramente habrá. De esta noticia no se ha hecho eco ningún medio, se ha tapado el escándalo. Si Colau gana las próximas elecciones municipales ya podrá empezar a pensar de dónde vienen los votos".

Números redondos: 1.600 magrebíes justos y 1.595 que viven en Marruecos. Presuntamente tienen "ayudas que da el ayuntamiento" y un piso, pero "seguramente" habrá más y votarán "por correo".

Este conjunto de invenciones en tres tuits no ha pasado inadvertido y, ante lo que se expone, la propia Guardia Civil ha salido al paso y también los Mossos d'Esquadra. Lo cierto es que el mensaje se ha viralizado en castellano y catalán, y también se comparte en masa como una imagen capturada en Facebook y WhatsApp, además de en Twitter.

La Guardia Civil confirma que no ha entrado en ningún "piso de la zona de Horta-Guinardo porque en ese piso figuraban 1.600 empadronados de origen magrebí" ni ha realizado operación similar alguna. En todo caso, en cualquier piso medio no cabría ni una cuarta parte de esos "1.600 empadronados" y además la Guardia Civil.

Esos "1.600 empadronados" no figuran en el padrón municipal de Barcelona, donde el máximo de habitantes lo ostenta una una casa sin división horizontal con 32 personas registradas.

Pero lo que menos sentido tiene de estos mensajes es la frase "Si Colau gana las próximas elecciones municipales ya podrá empezar a pensar de dónde vienen los votos". Si se refiere a los "1.600 marroquíes empadronados", en ningún caso podrían votar en las próximos comicios municipales, al margen de que estuvieran o no empadronados.

Solo pueden votar en las elecciones municipales las personas mayores de 18 años con nacionalidad española o de un Estado miembro de la Unión Europea que figuren en el censo.

Podrían hacerlo también si lo solicitaran algunos extracomunitarios que proceden de los trece países con un acuerdo de reciprocidad en ese sentido, pero no es el caso de Marruecos. Tienen acuerdo de reciprocidad con España: Bolivia, Cabo Verde, Chile, Colombia, Corea del Sur, Ecuador, Islandia, Noruega, Nueva Zelanda, Paraguay, Perú, Reino Unido y Trinidad y Tobago. Por lo tanto,  en ningún caso los marroquíes empadronados pueden votar, ni presencialmente ni "por correo", como dicen el tuit.

Todas esas falacias se comentan así alegremente en Twitter y muchos las hacen suyas. El tuit sigue ahí, suscitando comentarios contra Ada Colau, los "1.600 empadronados de origen magrebí" y Barcelona en general.