Posibilidad de un nido

Las redes como cuestión de clase

Las redes como cuestión de clase
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Llevamos ya un tiempo hablando del trabajo no remunerado. Sobre todo referido al que realizan las mujeres en lo que se ha dado en llamar "los cuidados": criar, limpiar, alimentar, comprar, cocinar, educar, traer y llevar criaturas a los entornos educativos y sanitarios, hacerse cargo de las personas mayores... Es cierto y es bárbaro. Sin embargo, hay otro paquetón de horas que dedicamos a "lo laboral", en este caso hombres y mujeres, de forma ¿inconsciente? No lo tengo claro.

Permítaseme hoy ceñirme a lo económico. Otra cosa son las necesidades afectivas, otra cosa son.

El trabajo se define como "una ocupación retribuida". En términos más concretos, trabajar supone ofrecer una parte de tu tiempo de vida a cambio de una remuneración. Más allá de la necesidad de relaciones sociales, insisto, una cantidad notable de profesionales dedica gran parte de su tiempo a las redes sociales. Las autoras y autores promocionan sus obras, de la misma manera que periodistas, artistas, comerciantes, pergeñadores de teorías etc dedican un tiempo precioso en difundir-se. Eso se llama trabajo.

Trabajar.

Recuerdo uno de los cambios más sucios de lo que consideramos "lo laboral". Sucedió cuando la clase trabajadora (de arriba abajo) aceptó llamar "vacaciones" al periodo de tiempo que no trabajaba, pero tampoco cobraba. No trabajar no significa tener vacaciones. No trabajar significa sencillamente eso: no trabajar. Punto pelota. Las vacaciones son remuneradas. Si no te pagan vacaciones es que no trabajas. Un mes, una semana o un año.

Ahora millones de personas añaden a su trabajo un paquetón de horas de llamémosle "difusión" de lo hecho. O sea, tú escribes, actúas, programas, creas, aportas lo que sea a una empresa equis y cobras por ello. Pero además dedicas un tiempo equis más equis en difundirlo, promocionarlo, contarlo, darle aire, en hacerlo cundir.

¿Por qué?

¿A cambio de qué?

Si exceptuamos a la clase política y algún extravagante como Arturo Pérez Reverte, ninguna persona rica se dedica a las redes sociales. ¿Para qué? A menos que necesites apoyos (ellos ya los tienen) de tipo "popular" que te rente (no a nivel egoalimenticio, ¿por qué deberías gastar parte de tu tiempo en darte pisto público? ¿Quién gana? ¿Cuánto tiempo dedicas a ello? ¿Qué sacas a cambio, económicamente hablando?

El tiempo dedicado a las redes sociales ligado a lo económico es una cuestión de clase.

Solo eso.

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