Otras miradas

Macrobrote: 200 MENES en Mallorca

Gloria Santiago

Vicepresidenta primera y diputada de Unidas Podemos en el Parlament de Baleares

Macrobrote: 200 MENES en Mallorca
Estudiantes, que se encontraban en cuarentena por el macrobrote de covid-19, abandonan hotel Bellver de Palma de Mallorca en dirección al puerto y al aeropuerto de la capital balear para abandonar la isla, algunos de ellos rumbo a Valencia. EFE/ATIENZA

Baleares era desde junio la Comunidad Autónoma con la mejor situación sanitaria por la Covid-19, registramos el menor exceso de muertes del país. Llegar a esa buena noticia nos ha costado un esfuerzo incalculable. Hemos demostrado un comportamiento ejemplar y una responsabilidad colectiva envidiable. Pensar en lo común y protegernos a todos y a todas era lo que se decía al principio de la pandemia y la gente de Baleares ha cumplido con creces.

Hemos soportado unas restricciones durísimas en defensa de la vida de la gente de estas islas, un aislamiento social sin precedentes, toques de queda más prolongados que en el resto de España, comercios cerrados durante largos meses. Con la llegada de viajes masivos de gente que no cumple las normas, todo el esfuerzo podría quedar en nada.

En esta comunidad autónoma las autoridades nos hemos partido la cara para proteger a las personas de todas las islas y alejarlas de una cama en la UCI. Siempre con la mirada puesta en salvar los empleos de una temporada que ahora tenemos encima y amenaza con más muertes si las visitas no se comportan.

A dos años de legislatura, el Govern de las Islas Baleares se ha dejado el lomo en sacar adelante ayudas millonarias para proteger a todos los sectores afectados, y también para proporcionar ingresos a las miles y miles de familias que llevan 16 meses sin turistas. Aquí se consiguieron 855 millones para ayudas a fondo perdido para autónomos, pequeñas y medianas empresas. Se ha contratado profesorado como nunca antes para que la calidad educativa no sufriera.

El esfuerzo de toda la sociedad balear al completo ha sido literalmente heroico. Y entiendo, como mujer joven, las ganas de expansión y de ocio que tiene la gente joven y en general, toda la población, pero la irresponsabilidad en tiempos tan delicados no puede tolerarse. Ahora llegan las fiestas en las que no se mantiene la distancia y se bebe sin mascarilla. Las acciones individuales tienen consecuencias colectivas y el todo incluido también incluye contagiarte de coronavirus. El potencial desastre que pueden causar 200 chavales contagiados es grave tanto para su salud como para la salud de la gente de estas islas, que ahora ya podía disfrutar de una libertad responsable y bien merecida.

El auto de fiscalía dejaba salir a los jóvenes del hotel de 4 estrellas en el que estaban alojados. Algunos que dieron negativo en la PCR o que simplemente se negaron a hacérsela han desarrollado el virus. No puede ser que quienes vengan de fuera cuestionen las normas porque eso es poner en peligro a la gente de Baleares y por ahí no vamos a pasar. Si las cumples en tu casa, aquí también.

No eran 200 jóvenes secuestrados, eran 200 jóvenes que pueden estar contagiados. No es lo mismo estar alojado en un hotel de 4 estrellas que estar en un CIE. El nivel de trivialización ha sido demencial. Que le pregunten qué es pasarlo mal a las personas ancianas que tuvieron que pasar el confinamiento en residencias, solas. Que contrasten información sobre qué es angustia y sensación de encierro con todas aquellas familias que se confinaron en casas sin ventanas y sin fecha para volver a trabajar.

El coronavirus ha traído casi 4 millones de muertes en todo el mundo, frivolizar con este tema es preocupante. Los padres y madres de esos adolescentes que se quejaban porque no podían beber cerveza. Tendrían que tomar nota, como poco, del comportamiento y las aspiraciones que tienen sus criaturas.

Ante las ganas de salir de fiesta y pasarlo bien, que también yo misma anhelo, hay que pensar en la responsabilidad colectiva y muy especialmente, en todas las personas que han estado aguardando pacientemente en casa y cumpliendo las normas para poder salir a trabajar de temporada en Baleares porque nos guste más o menos el modelo de monocultivo turístico, de momento, es lo que tenemos. Bienvenidos y bienvenidas a las Islas Baleares: un ejemplo de protección a la vida por la responsabilidad colectiva. Donde fueren haz lo que vieren.

Más Noticias