Análisis sobre las improbables transformaciones electorales de Europa

Análisis sobre las improbables transformaciones electorales de Europa

 

 

 

 

 

 

De nada sirve que gane Hollande si no está el pueblo de Francia en la calle. No hay solución en Grecia si no hay decisión por parte del pueblo de asumir su propio camino, si no es consciente del precio de determinadas decisiones. Contra las presiones de los "mercados", el único tapón posible es el pueblo constituyente que, como en Francia en 1791, en Cádiz en 1812,  en París en 1871, en México en 1910, en Rusia en 1917, en Venezuela en 1990, en Ecuador o Bolivia en 2008 o Islandia en 2011 es pueblo en armas. Y es apoyada en la fuerza de las bayonetas (reales o simbólicas) que levanta una nueva Constitución que cada ciudadana y ciudadano sienten como propia y la defienden contra sus enemigos porque se ha construido desde las bases.

Que las armas hoy no sean fusiles ni cañones ni granadas sino presión desobediente y pacífica, no le quita un ápice de violencia al asunto. Una violencia sin sangre pero con la fuerza para romper el rumbo de las cosas. El que nos lleva al abismo. Porque cuando los "mercados" terminen con España, seguirán con Italia. Y cuando dejen a Italia exangüe, le tocará a Francia. Y si llega el caso, terminarán con Alemania. Y ya será tarde para hacer nada.

Reportaje de El confidencial sobre Europa