El derecho a huelga
Soy usuario diario de Metro y, por tanto, sufro las molestias de la huelga como el resto de los madrileños. Pero creo que lo que corresponde es apoyar a estos trabajadores en su lucha, que es la de todos los trabajadores, habida cuenta de las continuas agresiones que sufre el mundo del trabajo por parte del empresariado y de políticos como los de la Comunidad de Madrid, prepotentes y crueles con los de abajo. El chantaje de la patronal hacia los trabajadores es diario, así que esta demagogia de que los trabajadores de Metro están chantajeando a todo Madrid porque están contestando como se merece a la patronal es un acto de hipocresía intolerable.
La Comunidad de Madrid y la patronal reconocen farisaicamente el derecho a la huelga, pero siempre y cuando la huelga no provoque ninguna molestia y no sirva para nada. Adelante, trabajadores del metro.
Pedro López López / Madrid

El lamentable dictamen del Tribunal Supremo sobre el Estatut
Entiendo perfectamente que tanto el Partido Socialista como el Partido Popular estén entusiasmados con el dictamen del Tribunal Supremo sobre el Estatut.
Efectivamente, el Partido Socialista tiene razón cuando dice que se ha respetado el 99% del mismo, y el Partido Popular también la tiene cuando dice que el alto tribunal les da toda la razón en su rancia visión de España. Hay un solo artículo en la Constitución Española, que representa menos del 1% de todo su contenido, cuya supresión pondría al país patas arriba.
Eso es lo que el Tribunal Supremo ha hecho con el Estatut: poner patas arriba la voluntad del pueblo catalán y sus instituciones.
Mario López Sellés
Madrid

La tragedia ferroviaria
de Castelldefels
Pasar por las vías del tren siempre es una imprudencia. Lo que ya no está tan claro es si no se pudo haber evitado que muchos optaran por cruzarlas, dadas determinadas circunstancias que pudieron desorientar a la gente: acceso cerrado recientemente, aglomeración, falta de luz y de indicaciones claras para facilitar el paso.
Las declaraciones de algunas autoridades culpando a las víctimas me producen vergüenza. Puede que la estación cumpla las ordenanzas, pero se ha cobrado 13 vidas. Y la muerte es más determinante que las justificaciones de la burocracia.
Archibaldo de la Cruz
Barcelona

El chocolate del loro
en la Comunidad Valenciana
Ante el plan de austeridad del Gobierno central para intentar superar la crisis, el Partido Popular de Valencia recorta en las partidas menores y más simbólicas como la de lengua propia o la de las escuelas y bandas de música.
Las grandes partidas, en cambio, son intocables: Ecclestone –el magnate de la Fórmula 1– y el yerno de Aznar –que saca partido de todos los negocios– continuarán llenándose los bolsillos de nuestro dinero, que tan generosamente reparten tanto la Generalitat como el Ayuntamiento de Valencia.
¿Crisis? ¿Qué crisis?
Marc Antoni Adell

Ni talismán ni distracción: machismo
¿Cómo pudieron culpar a la reportera de Telecinco Sara Carbonero del fracaso contra la Suiza? Y cuando la selección gana, resulta ser un talismán. ¿Pero es que aquí somos
tontos?
Quienes opinan de esta forma tienen una mente estrecha, casposa y machista. Que la dejen hacer su trabajo, independientemente de si tiene una relación con el portero o no.
A ver cuándo se juzga a las mujeres por su trabajo y no por su imagen o sus relaciones.
Asun Jiménez Colón
Alcalá de Guadaíra (Sevilla)

Guerra abierta a los paraísos fiscales
Señor presidente: la fuente principal para recaudar dinero rápido pasa por acabar con los lugares seguros donde se esconde dinero sacado del sudor del pueblo.
Utilice toda la fuerza y recursos disponibles para acabar con ese robo permitido y que ese dinero regrese a las arcas del Estado.
Repare las agresiones a jubilados, parados, jóvenes, amas de casa, etcétera, y tire a la papelera la reforma laboral que está destinada a hacer que los pobres sean más pobres. No juegue entre dos aguas y mójese un poco más.
La situación pasaría por un cambio de sistema político, económico y social para acabar con toda esta paranoia de ladrones y farsantes. El camino ya lo dibujaron Marx y Lenin, pero mientras tanto habrá que combatir esta situación como se pueda.
Las fuentes que arrojan grandes beneficios deben ser propiedad del Estado con la supervisión del pueblo.
Francisco Gargallo Lizandra
Mollét del Vallés (Barcelona)

El tren y el centralismo
de nuestra Alta Velocidad
El Estado del mundo, después de China, que tiene más kilómetros (en construcción y en servicio) de líneas de tren de alta velocidad es España. Esta inversión tan cara se ha llevado a cabo con una mentalidad centralista. España ha hecho un dispendio de 50.000 millones en proyectos, la gran mayoría baldíos.
El Estado francés, país centralista por antonomasia, ha planificado mejor una inversión en transporte público ferroviario, teniendo más en cuenta a los usuarios del tren.
Ante la nefasta planificación del transporte ferroviario en España, las consecuencias son escalofriantes: se han pulido unas inversiones públicas que eran muy necesarias en otros ámbitos mientras, y esto es lo peor de todo, no se ha blindado el tren convencional, el tren del día a día, para las necesidades básicas de la gran mayoría de ciudadanos de este país.
Josep M. Loste Romero
Portbou (Girona)