Ahora que todos protestan contra el ajuste fiscal del Gobierno, hay un colectivo que no ha abierto la boca: los ricos. No se les ha oído una crítica a esa nueva y enigmática figura impositiva anunciada por Zapatero, que habría de servir para que "contribuyan más los que más tienen". ¿Tal vez porque su experiencia les dice que eso no se va a conseguir? Entre los ricos también hay clases: están los asquerosamente ricos, los ricos a secas y la gente con pasta. En común tienen, además del dinero, un factor: lo escurridizos que siempre han sido para Hacienda, muy por encima del español medio asalariado.

¿Cuántos millonarios existen en nuestro país? Según diversos estudios de consultoras privadas, hay cien mil personas adjetivables como "ricas", gente que tiene alrededor de un millón de euros o más en patrimonio. La intención del Gobierno es gravar con un Impuesto extraordinario a la Riqueza a quienes tengan más de un millón y medio de euros en todo tipo de bienes. Según las últimas estadísticas del Impuesto sobre Patrimonio, hay 47.614 declarantes con más de 1,5 millones de euros. En conjunto, pagaron 1.239 millones de euros en el ejercicio 2007 ya que después el tributo fue dejado sin efecto por el Gobierno. Es una cifra que no parece muy importante si se compara con la recaudación fiscal global, pero que equivale a lo que ahora se ahorrará el Estado en 2011 congelando las pensiones. O sea, de no haberse eliminado el gravamen por patrimonio hace dos años, lo mismo hoy no estaríamos hablando de alguno de los recortes sociales que se nos vienen encima.

De la nueva figura impositiva sobre los ricos, Hacienda no espera una gran capacidad recaudatoria, en comparación con los miles de millones que se obtienen del IRPF o del IVA, y que son pagados fundamentalmente por la clase media. En realidad, se busca más un cierto rearme moral para los que sufren la crisis, algo así como decirles: "tranquilos, que los ricos no se van a ir de rositas". Precisamente por eso, el Gobierno arriesga su credibilidad con este proyecto. Convivimos todos los días con los paraísos fiscales, las tramas de fraude, las facturas sin IVA, los ingresos no declarados. De poco servirá el Impuesto sobre la Riqueza si no se logra que por los demás impuestos paguen todos los que tienen que pagar.

Por otra parte, la solución al ahogo financiero del Estado sólo puede venir por un replanteamiento de los grandes tributos.¿Cuál cree que es el tipo efectivo en el Impuesto sobre Sociedades, el que de verdad se paga? El tipo nominal es el 30%, pero el tipo efectivo para las empresas con ingresos superiores a 180 millones de euros anuales es el 11,6%, según los últimos datos de la Agencia Tributaria sobre 2007. Es decir, que antes de que empezara la crisis, las grandes empresas, haciendo uso de deducciones, compensaciones o ingenierías fiscales, conseguían pagar sólo la tercera parte de lo que nominalmente exige el impuesto. Y eso las que pagan, porque al 35% de esas grandes empresas les salió una cuota negativa. Algunas deducciones están justificadas, pero aquí también se cumple el dicho de "le das la mano y te coge el brazo".