La trama mediática

Delirios

Qué peligrosos son los dulces efluvios de la victoria que aparece en lontananza. A más de dos y a más de tres emplumados diestros se les han subido a la cabeza y andan aventando sermones aun más raros que de costumbre. César Vidal, por ejemplo, ha sido poseído por Torquemada: "El nacionalismo catalán –y no sólo él– está escupiendo directamente al rostro de Dios, al que la Biblia denomina con el nombre de 'Anciano de días'. Puede que algunos no le den importancia a estas circunstancias, pero una sociedad que no respeta y cuida a sus ancianos –como es la sociedad construida por el nacionalismo catalán– ha perdido el temor de Dios y sólo puede esperar, tarde o temprano, encontrarse con Su terrible juicio". "Penitenciagite!", podía haber rematado su monserga en La Razón.

No es el único que muestra esos síntomas. En Libertad Digital, Sebastián Fanjul —¿Pariente del que asaltó el cuartel de la Montaña en el 36?— espumaraja con los ojos fuera de las órbitas: "Mientras veo en la TV a los profesores –reales o supuestos– vociferando por las calles de Madrid, pastoreando a chicos que se ilustran en el valor pedagógico de la bronca y se especializan en aullidos y mangancia, el no menos supuesto ministro de Educación envisca a la jauría incitando a la huelga. ¿Será verdad que Rajoy enderezará esto?". Quizá se pase con Lexatin.

Anson vuelve a las andadas

Menos sorprendente, porque son ciento las veces que lo hemos contemplado en este estado, Luis María Anson creía estar en la piel de Zapatero y peroraba así en El Mundo: "Como la puñetera Constitución prohíbe la amnistía, habrá que indultar uno a uno a sus setecientos presos. Después se organizan unas elecciones bajo la dictadura del miedo. Eta tiene ya el 30% del poder político en el País Vasco, gracias a mis maniobras en el Tribunal Constitucional. Deben llegar al menos al 70%, burlando el cinismo del Partido Nacionalista Vasco, que durante 30 años se ha dedicado a recoger las nueces mientras los terroristas agitaban el árbol".

A otros les ha hecho menos efecto. Fernando Fernández, mismamente, se limitaba a postularse en ABC como el inventor de la gaseosa: "Vivimos tiempos de impostura y falsedad, en los que algunos políticos dicen una cosa y hacen otra".

Como remate, este titular de La Razón: "El Rey pone realismo ante el 20-N: nos esperan grandes sacrificios". No se detallaban los que le tocarán a él.

Más Noticias