A estas alturas es obvio que la responsable de la política exterior de la UE, Catherine Ashton, lo está haciendo francamente muy mal con respecto a Oriente Próximo. La UE carece de una política seria en la región y Ashton se ha convertido en una marioneta de Estados Unidos e Israel, aunque esto es algo que no debería extrañar puesto que los europeos siempre han seguido con los ojos cerrados las directrices de americanos e israelíes.

El lunes, el Guardian de Londres advirtió que la UE prepara de manera inminente un incremento substancial de las relaciones bilaterales con Israel. Y como una ironía del destino, ese mismo día Israel anunció la inminente destrucción de ocho aldeas palestinas en la Cisjordania ocupada, al sur de Hebrón, para habilitar un campo de tiro para el Ejército israelí. Como si no tuvieran suficiente espacio para disparar en el Neguev...

Un diplomático europeo ha criticado la decisión de la UE argumentando que Israel no cumple sus obligaciones internacionales en los territorios ocupados, pero al mismo tiempo el diplomático ha dicho que ningún ministro europeo se opondrá a la mejora de los acuerdos con Israel por temor a la reacción de las comunidades judías que hay en Europa.

El sometimiento de la política a los grupos judíos, algo que es corriente en Estados Unidos, se ha extendido a Europa, y las palabras del diplomático europeo simplemente corroboran esta tendencia.

Es evidente que la actitud de la UE y de Ashton no contribuye a crear un clima de paz en la región, y el hecho de que Israel haya anunciado la demolición de ocho aldeas palestinas de una tacada para crear un campo de tiro simplemente confirma que los israelíes se siente lo suficientemente fuertes como para jugar con la UE a su antojo.